La Policía Foral ha recuperado en una localidad de la Merindad de Estella 43 teléfonos móviles de alta gama robados durante los Sanfermines 2024, localizados gracias al seguimiento de uno de estos dispositivos, según ha informado el cuerpo autonómico en una nota.

Tres personas, integrantes de un grupo organizado, han sido detenidas y puestas a disposición judicial, decretándose su libertad. La investigación se inició el día 8 al geoposicionarse un móvil sustraído en una casa rural de Tierra Estella donde los ladrones se habían instalado.

Patrullas de la comisaría de Estella vigilaron la vivienda hasta que pudieron ser identificados con sus pertenencias cuando la abandonaban. Descubrieron 43 teléfonos móviles envueltos en papel de plata ('jaula de Faraday', para evitar conexión a la red y dificultar su rastreo). Los móviles emiten señales constantemente, incluso estando apagados. El GPS, que permite localizarnos dónde estamos, no importa si está apagado o encendido. Igualmente el teléfono será localizable por las torres que triangulan las señales. El hecho de que un teléfono no tenga señal (cuando no puedes llamar), no implica que no sea ubicable, ni que haya dejado de enviar señales.

En aquel momento fueron detenidas dos mujeres y un hombre por delitos de hurto, desobediencia, resistencia y atentado, ya que intentaron huir y acometieron contra los agentes durante la detención.

Contacto con los propietarios

La investigación la continuó el Grupo de Policía Judicial de Estella, que trasladó el atestado a la Brigada de Delitos Económicos y contra el Patrimonio de Pamplona para iniciar las averiguaciones de los titulares de los móviles. Se confirmaron denuncias interpuestas en Policía Foral, Policía Municipal de Pamplona, Mossos, Guardia Civil, Ertzaintza, Cuerpo Nacional de Policía y Gendarmería y hasta el momento se ha contactado con 23 propietarios por diversos lugares de España y Francia, confiándose en devolver todos los teléfonos.

Un total de 40 de los móviles eran modelo Iphone y más de la mitad robados a mujeres, víctimas propiciatorias ya que los ladrones evitan varones que puedan enfrentarse.