Último encierro de San Fermín: Miura vuela en Pamplona

La histórica ganadería de Miura, la más veterana en los encierros de Pamplona y habitual en cerrar las carreras de San Fermín, ha protagonizado este lunes una fugaz galopada hasta los corrales de la Plaza de Toros.

Ha sido el encierro más rápido y limpio de estas fiestas. Dos minutos y 16 segundos han empleado los 6 impresionantes morlacos de Zahariche en cumplimentar los 849 metros del recorrido, donde a la hora de redactar esta información se ha contabilizado un balance provisional de tres personas trasladadas al centro hospitalario con traumatismos.

La velocidad de los ‘miuras’ ha quedado de manifiesto desde la salida de los corrales, cuando dos enormes toros se han puesto a ambos lados de la manada, comandada desde el principio por un manso que ha mantenido el impulso de la torada sin dejarse adelantar.

La subida por la cuesta de Santo Domingo ha sido compacta, con los toros lanzados y sin derrotes ni amagos de embiste. En la curva de Mercaderes dos ‘miuras’ se han colocado al frente de la manada, pero enseguida ha aparecido por allí otro cabestro que se ha puesto a tirar del grupo.

Pese a que había menos corredores que en días anteriores, los corredores no lo han tenido fácil para colocarse cerca de las apabullantes astas de los ‘miuras’, que han enfilado Estafeta en compacta formación.

En el tramo de Telefónica, como es habitual, se han congregado decenas de mozos, algunos corredores y otros simples espectadores, pero se han abierto espacios para los más experimentados.

Un toro ha causado algún susto en la parte derecha de la bajada por el callejón, pero los seis toros de Miura han cumplido con el guión y han entrado a los corrales de la Plaza de Toros sin despistes.