Koldo Monreal, director de On Haus Global System, explica la importancia de la ventilación en la vivienda y en otros espacios cerrados.¿Qué beneficios tiene para la salud la construcción de casas pasivas?

- El concepto de casa pasiva en sí mismo no tiene más beneficios directos que los que hacen referencia a la demanda energética. Ahora bien, una casa pasiva bien ejecutada, sin puentes térmicos, ni desfases incontrolados de temperatura... va a otorgar a sus moradores un nivel de calidad muy alto. Estos espacios o viviendas consiguen regular de forma autónoma dos factores altamente relevantes como son temperatura y humedad, pero es que, además, son capaces de eliminar sustancias químicas generadas en los espacios interiores. En definitiva, respirar un aire limpio y no contaminado en nuestros hogares es necesario, dado que nos ayudará de forma notable a conseguir un descanso adecuado y reparador, producirá chispa y creatividad, pero, sobre todo, nos hará ganar en confort y salubridad.

¿Cómo se ventilan este etipo de viviendas?

- Las casas pasivas deben de ser ventiladas tal y como ocurre con las construcciones tradicionales. La diferencia principal radica en que cuando hablamos de un sistema mecánico de ventilación, dicho sistema será el encargado de mantener todas las estancias totalmente ventiladas de forma constante y continuada, mientras que, en el modelo tradicional, la actuación deberá ser producida con más o menos frecuencia por la manipulación directa del propio usuario. Si además dotamos al sistema de ventilación con un recuperador de calor, conseguiremos mantener nuestros espacios habitados totalmente acondicionados y sanos de una forma económica y sostenible.

¿Tras la situación vivida por la pandemia existe más consciencia y demanda de espacios interiores saludables?

-Tras lo acontecido, efectivamente, somos más conscientes de ciertas carencias de confort y salubridad en el hogar y en otros espacios, especialmente en aquellos que sufren de cierta ocupación (aulas, despachos, salas de conciertos, locales de oco, etc). También, somos más concientes en lo relativo al gasto energético y al coste que supone. Deberemos tomar acciones más sostenibles, puesto que, de lo contrario, la energía será cada vez más cara y nuestro mundo mucho más finito.