El consejero de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra, José María Aierdi, subrayó durante su intervención en el Encuentro DNN la necesidad de avanzar hacia un modelo de economía circular como estrategia transformadora del tejido productivo. Aierdi destacó el reciente proceso de reflexión interna que llevó a la creación de Orekan, una sociedad pública con una “vocación proactiva” y renovada para impulsar el desarrollo sostenible. El consejero agradeció la implicación de los agentes presentes, como la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, la Fundación Aspace Navarra para el Empleo, la sociedad pública Orekan y la Fundación Ecolec, anfitriona del evento, por su papel en la promoción de la economía circular como “argumento medioambiental, económico, social y cultural”.
Aierdi defendió el enfoque colaborativo de Navarra Zirkular, iniciativa público-privada que ya suma más de 200 firmas adheridas. Añadió que “la crisis climática y energética exige una actitud más proactiva” y que este contexto debe verse como una oportunidad para avanzar hacia una economía “más limpia, con menos huella de carbono”, en la que la reutilización de residuos se convierta en una práctica sostenible y competitiva.
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El consejero hizo un llamamiento al conjunto de administraciones para asumir su parte de responsabilidad mediante incentivos, formación, estándares de calidad y normativas ágiles. Recalcó que la economía circular no solo es ambiental, sino también una cuestión de “competitividad de las empresas europeas y de los derechos de la ciudadanía”. En referencia a los aparatos eléctricos y electrónicos, destacó la importancia de la directiva europea del derecho a reparar como “paso disruptivo” para empoderar al consumidor. “Una ciudadanía informada puede actuar como un gran motor de cambio”, afirmó.
Finalmente, defendió que “la alianza entre empresas y consumidores representa una alternativa viable, competitiva y respetuosa con el entorno y las personas”.
