PAMPLONA. El exdirector-gerente del Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea ha afirmado que mejorar este servicio es "posible necesario y urgente" porque requiere "ser refundado, transformado radicalmente".

Rubio, que ha comparecido para explicar los motivos de su reciente dimisión, ha valorado "el buen hacer" de los profesionales del SNS-O y la calidad de éste en comparación con otros, pero ha advertido de que "le hace falta una profunda metamorfosis" porque "no es suficiente con seguir haciendo algunas cosas bien".

Entre los cambios ha considerado "urgente e imprescindible alinear la responsabilidad con la capacidad de gestión", y por ello ha reclamado "un reempoderamiento" del Consejo de Gobierno del SNS o del director-gerente, y atender a una organización "enferma" y con "reinos de taifas".

"La meta es mejorar la salud, la calidad de los servicios y la sostenibilidad del sistema", ha dicho, y ha añadido que con este propósito aceptó el cargo, junto a un equipo directivo ya nombrado por la consejera Marta Vera y un modelo asistencial ya definido pero al que quiso añadir dos proyectos para impulsar la seguridad del paciente y la puesta en servicio de espacios vacíos.

Tras subrayar que Osasunbidea "necesita reformarse", ha precisado que este organismo autónomo debe tener capacidad sobre los sistema de información, sobre la formación y el apoyo a los profesionales, sobre la comunicación interna y externa, y sobre los servicios jurídicos, y además ha considerado "imprescindible garantizar la transparencia, que se sepa quién toma qué decisiones".

"Podemos hacerlo mucho mejor, que no es hacer más rápido lo mismo sino hacer mejor lo que hacemos y hacer otras cosas que no estamos haciendo", y como prueba ha citado "las listas de espera que siguen creciendo", la "falta de equidad en el acceso", la "insatisfacción" de los profesionales, un colectivo "triste y deprimido", y la "notoria insatisfacción" de los usuarios.

Ha criticado también recortes de gasto "para que queden bien las cuentas a corto plazo cuando haciendo bien las cosas se ahorra" y de hecho ha destacado que el 20 % del presupuesto se destina a arreglar los problemas que genera el propio sistema.

Asimismo ha apostado por otro modelo para la atención de enfermos crónicos que mejoraría la calidad y ahorraría dinero, así como para pacientes en el final de la vida.

A juicio del exdirector-gerente, Osasunbidea "no está hoy preparada" para transformarse, para ser "más transparente, más participativa, más innovadora, centrada en mejorar la experiencia de profesionales y pacientes", y además "urge rehacer la estructura desecha y desmantelada".

Después de cuestionar como se ha actuado en cocinas o con el cambio de carros, Rubio ha reconocido que sus planteamientos no fueron bien acogidos.

"Desde el principio tuve muchísimas resistencias del equipo directivo, algunas lógicas y otras inaceptables", y estas dificultades crecieron hasta pedir "sin conseguir" alguna destitución y finalmente plantear su propia dimisión a los 14 meses de llegar al cargo cuando esas dificultades "se convirtieron en limitaciones extremas".

Según Rubio, cuando en junio la consejera le indicó que trabajara desde su despacho, sin relaciones, decidió dimitir porque así "era imposible" hacer el trabajo que tenía encomendado, "las metas no pueden conseguirse desde un despacho haciendo la cosas como siempre se han hecho".

Mientras que el portavoz de UPN ha considerado que a Rubio le ha faltado "saber adaptarse", desde la oposición el PSN ha considerado que su dimisión "es un fracaso" del Gobierno y "especialmente" de la consejera Marta Vera.

Bildu por su parte ha cuestionado el "autoritarismo" de la consejera, Aralar ha asegurado que las mejoras necesarias no se consiguen con recortes, e I-E ha aludido a la "incapacidad" de Vera.

REPROCHES A LA CONSEJERA La parlamentaria de Bildu Bakartxo Ruiz ha considerado que "es grave tener la enésima dimisión en Salud y es grave tener tres gerentes en el SNS en tres años, porque no puede garantizar ninguna continuidad en el trabajo", pero ha indicado que es "más grave tener a una persona en un despacho y no dejarle hacer su trabajo". "La consejera tendrá que dar explicaciones", ha señalado.

Por su parte, la parlamentaria de Aralar Asun Fernández de Garaialde ha señalado, refiriéndose a la consejera, que "para mejorar hay que reconocer que no sé es perfecto y no hay que ser arrogante", y ha indicado que "aunque estamos de acuerdo en reconocer el sistema que tenemos, eso no quita para que en los últimos años haya ido a peor".

La parlamentaria de I-E Marisa de Simón ha afirmado que la salida de Rubio del SNS "evidencia el fracaso de la consejera Vera al frente del departamento de Salud" y ha citado "la evidente mala gestión en las listas de espera, la participación inexistente o la falta de transparencia".

Por parte de Geroa Bai, Manu Ayerdi ha destacado que la explicación de Rubio le ayuda en su "reflexión estratégica" respecto al SNS y se ha interesado por la transparencia en el servicio, para preguntar quién tomaba las decisiones. "Si se han tomado decisiones importantes y no las ha tomado usted, ¿quién las ha tomado? ¿usted no podía decidir?", ha preguntado.

El portavoz de UPN, Antonio Pérez Prados, ha dicho que "hubiese deseado por el beneficio del SNS y de los pacientes que Juan José Rubio hubiese tenido el mayor de los éxitos" y ha lamentado que "su comparecencia en comisión sirva para atacar a la consejera de Salud y se hace por aquellas personas que son las defensoras de la promoción de la mujer, será de algunas mujeres, de las que están en su onda".

El parlamentario del PSN Samuel Caro ha indicado que la salida de Rubio "es el anuncio de un fracaso del Gobierno foral y especialmente de la consejera de Salud, que no ha estado a la altura para poder conformar equipos de confianza para abordar un proceso realmente complicado, como la unificación de los hospitales o la transformación de la sanidad navarra".

Finalmente, la parlamentaria del PPN Eva Gorri ha indicado que Rubio "ha hablado muy poco de los aspectos que rodearon su dimisión y sí mucho de cómo está la sanidad navarra, e indudablemente todos queremos mejorarla". Ha añadido que "la frase que más llama la atención es que la consejera le pidió que se quedara en su despacho".