tudela - José Larraga Lacilla, de 65 años de edad, natural y vecino de Tudela, falleció ayer al sufrir un accidente y ser aplastado por el motocultor con el que trabajaba, en un finca agrícola de su propiedad, en el término de Las Norias de la capital ribera.
El cuerpo del hombre fue hallado hacia las 12.53 horas por una persona que pasaba por el lugar y que fue la encargada de dar aviso a los servicios de emergencia. La víctima se encontraba entre la máquina motocultora y un árbol y, de momento, se desconoce cuándo ocurrió el suceso.
La sala de gestión de emergencias de SOS Navarra movilizó unidades del parque de bomberos de la capital ribera, que desplazaron una ambulancia medicalizada y el camión de rescate, aunque el hombre ya se encontraba sin vida. Por su parte, la Policía Foral envió al lugar una patrulla y al equipo de Atestados de Tudela, que se hizo cargo de la investigación de las causas del accidente. El cadáver de José Larraga Lacilla fue trasladado al Instituto Navarro de Medicina Legal, en Pamplona, para efectuarle la autopsia.
jubilado de mobilko José Larraga Lacilla tenía 65 años y era natural de Tudela, donde residía. Casado con Ana María Fernández, era padre de tres hijos: Daniel, Vanesa y Fernando; y tenía seis hermanos, tres de ellos ya fallecidos.
El hombre, que estaba jubilado, adquirió hace unos tres años el huerto donde fue hallado muerto, y vecinos de otras fincas comentaron que era habitual verlo acudir al lugar en bicicleta, por el camino de Las Norias que discurre en paralelo por la margen izquierda del río Ebro, a unos dos kilómetros del núcleo urbano de Tudela.
El suceso, que a expensas de lo que determine la investigación en curso es muy similar a otros ocurridos con motocultores (el último en Fitero, en agosto de 2014), causó una honda conmoción entre otros agricultores de la zona y de la Mejana, que no es la primera vez que viven accidentes de este tipo.
A esta reacción se unió la de Jesús Miranda, expropietario de la empresa Mobilko, en la que Larraga Lacilla trabajó durante más de 20 años. “Era un buen trabajador, estuvo conmigo más de 20 años, lo apreciaba muchísimo porque primero trabajó conmigo en Cerámica Tudelana y, cuando montamos Mobilko se vino conmigo. Era un hombre que estaba acostumbrado a manejar maquinaria de todo tipo en la fábrica. Para mí, la noticia ha sido una impresión tremenda porque lo apreciaba muchísimo, como todo el mundo”, manifestó en declaraciones a este periódico’.