Pamplona - La epidemia de gripe sigue en alza en Navarra acumulando un total de 4.037 diagnósticos cuando por estas fechas el año pasado eran 3.738, pero la gravedad de los casos es menor ya que en lo que va de temporada se han registrado en Navarra 138 ingresos a causa de la gripe frente a los 170 que se dieron en el mismo periodo de la temporada anterior y el número de fallecimiento ha bajado de 7 a uno. La explicación es que por el tipo de virus (gripe B) de esta epidemia se están librando las personas mayores de edad que solían protagonizar los cuadros más graves. Desde el Instituto de Salud Pública, además de recordar el protocolo sanitario para este tipo de situaciones, se destaca también la eficacia de la vacuna (se han puesto más de 120.000) al calcular que han evitado un 80% de atenciones en centros de salud y un 50% de hospitalizaciones. Los técnicos sanitarios aún no cuentan con perspectiva para evaluar la influencia del retorno a las aulas de la población infantil (cuyo volumen ha caído en Navidad) pero temen un repunte en este tramo de edad estos días.
Con la perspectiva que dan ya las primeras semanas de epidemia (alcanzó esta cota el 26 de diciembre y en esta primera semana de enero se han acumulado 1.907 casos más) los especialistas ya pueden comenzar a poner adjetivos y apellidos a una gripe que hasta ahora sólo había dejado estadísticas. La actividad gripal tiene una intensidad media y una tendencia creciente, con circulación predominante del virus B (91%) frente a la del año pasado que pertenecía mayoritariamente al tipo A (concretamente al subtipo H3N2). Además, se ha confirmado gripe en la última semana en 73 pacientes hospitalizados, 55 con gripe B, 14 con gripe A (H3N2), 3 con A (H1N1) y un caso pendiente de subtipar. La incidencia de la última semana es de 305 casos por cada 100.000 habitantes, y ha aumentado principalmente en adultos. Por áreas geográficas, las tasas son algo mayores en las áreas de Pamplona (319 por 100.000 habitantes) y Tudela (305) que en Estella (218). Asimismo, se ha producido un nuevo repunte de circulación del virus respiratorio sincitial (VRS), con la confirmación de 26 casos de infección por este virus, un 42% de los analizados. La mayoría de estos casos son menores de 2 años que cursan con bronquiolitis y requieren atención hospitalaria.
Precisamente este nivel de hospitalizaciones es el que proporciona la segunda característica cualitativa de la gripe de este año: afecta a más personas que el año pasado y viene ligeramente adelantada pero, al mismo tiempo, no está provocando el índice de ingresos y fallecimientos de la temporada pasada. La explicación reside en que son las personas de edad baja o media las que están sufriendo la mayor parte de contagios, una población menos vulnerable a priori a complicaciones fatales por esta enfermedad infecciosa. La gripe estacional es una enfermedad infecciosa vírica, que se transmite por vía aérea, que se manifiesta en el periodo invernal, se inicia repentinamente y tiene un periodo de incubación de uno a tres días. Se caracteriza por fiebre alta y afectación del estado general. Puede aparecer acompañada de dolores de cabeza y mialgias (dolores musculares) y de congestión nasal e irritación de garganta. La gripe se cura normalmente sin secuelas pero en gente mayor o con ciertas enfermedades puede dar lugar a complicaciones potencialmente graves.
Por ello, se recomienda acudir al centro de salud si afecta a personas más vulnerables: menores de 2 años, embarazadas, personas con enfermedades crónicas o ancianos; si existe un aumento de la dificultad respiratoria o la expectoración es verdosa o sanguinolenta; si la fiebre dura más de 4 días, es superior a 39 grados o reaparece tras haber estado sin fiebre 24 horas; o si aparece dolor o supuración de oídos, sarpullido o vómitos persistentes.
Evitar contagios. Para prevenir el contagio de la gripe, el ISPLN ofrece en su página web una serie de recomendaciones, como lavarse las manos con agua y jabón frecuentemente, cubrirse la boca al toser o estornudar con un pañuelo desechable, con la cara interna del codo o con el dorso de la mano; no frecuentar lugares con mucha gente para evitar contagios, entre otras. Una vez contagiado más allá de analgésicos, antitérmicos y antiinflamatorios hay que tener paciencia y esperar a que pasen los síntomas, que duran una semana, aunque remiten a partir del cuarto día.
Autocuidados con asesoramiento telefónico. Ante posibles dudas, la ciudadanía tiene la posibilidad de recibir atención mediante el Servicio de Enfermería de Consejo Sanitario, bien de manera on line (consejosalud@ navarra.es) o a través de los teléfonos 948 290 290 - 848 427 888. En él, personal de enfermería especializado ofrece a la ciudadanía información sobre la forma más adecuada de actuar ante problemas de salud o una respuesta a las dudas más frecuentes sobre su enfermedad o tratamiento. Funciona todos los días laborables entre las 14,30 y las 21,30 horas, y entre las 8 y las 22 horas en fin de semana.
Centros de salud. Ante casos con posibles complicaciones o personas vulnerables, se recomienda acudir al Centro de Salud habitual.
Urgencias. El siguiente nivel asistencial son las Urgencias Extrahospitalarias y, finalmente, el último son las Urgencias hospitalarias que deben reservarse para los casos más graves, explican desde Salud.