pamplona - Un total de 4.024 personas de entre 18 y 82 años estudian en este curso, 2017-18, en el centro de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) en Pamplona. La cifra supone un descenso con respecto al año académico anterior (hubo 4.201 estudiantes), y se remonta a cifras de 2009-2010, cuando se registraron 4.012 alumnos y alumnas.
Las cifras, según apuntó ayer la directora del centro, Carmen Jusué Simonena, son un reflejo más “real” del alumnado del centro, después de unos ejercicios marcados por la crisis económica y un crecimiento destacado en la demanda de formación. El récord fue el curso 2011-12, con 4.812 alumnos y alumnas, una cifra que, según Jusué, resultaba “hasta complicada” para la gestión del centro.
En el curso actual, el grueso del alumnado de UNED Pamplona son los y las estudiantes de grado, con 2.870. Por grados, los que presentan una mayor demanda son Psicología (581), Derecho (244) y Administración y Dirección de Empresas (193). Le siguen quienes cursan inglés (448), el alumnado del programa para mayores de 50 años UNED Senior (329), el del curso de acceso a la universidad para mayores de 25 y de 45 años (219) y, por último, el de másteres (158).
UNED Pamplona destacó estos datos durante la presentación, en conferencia de prensa, del día de la UNED, que tendrá lugar mañana, día 18, a las 19.00 horas en el Aula Magna. En el evento, se entregará el premio UNED Pamplona a la estudiante con el mejor expediente académico en el curso 2016-17, que es para la graduada en Estudios Ingleses María Herreros Lopetegui. También se entregarán los premios de fotografía y ensayo, así como los diplomas al alumnado que superó el curso de acceso a la universidad en 2016-17.
En referencia al alumnado mayor de 25 años que accede a la universidad, el coordinador del curso de acceso, Emilio Echavarren Urtasun, destacó la variedad de estos estudiantes, su “entusiasmo” por iniciar su formación universitaria y su esfuerzo, dado que a menudo compaginan estos estudios con un trabajo y con cuestiones familiares, lo que obliga, apuntó, a que la organización sea clave.