Las infecciones de transmisión sexual han subido un 84% en el Estado en tan solo cinco años. Así se desprende del informe hecho público por compañía Cegedim Health Data España. El VIH ha aumentado un 343 por ciento, la clamidia un 140%, el herpes genital un 59% por ciento, el virus del papiloma humano (VPH) un 45 por ciento y la sífilis un 43 por ciento. 

Y los motivos son claros: la gente ha perdido el miedo a las ETS, lo que provoca un descenso en las medidas de precaución. Así lo asegura el ginecólogo José Luis Neyro, que apunta varios factores que han hecho que las cifras se disparen. 

Y el primero, es que “la sociedad no ve las ETS como algo mortal”. De hecho, defiende que “la aparición del SIDA le hizo un enorme favor a las enfermedades de transmisión sexual, porque alertó de que se podía morir de eso”, lo que redujo drásticamente las infecciones a nivel mundial. Sin embargo, “los retrovirales hicieron justo lo contrario”, apunta. Transformó una enfermedad desconocida y que mataba en una crónica, “y se dejó de hablar de ello, y verlo como algo mortal”. 

"La sociedad ya no ve las ETS como algo mortal, y eso ha hecho que se pierda el miedo que se les tenía"

José Luis Neyro - Ginecólogo

Asimismo, además de la pérdida del miedo a la muerte y a la gravedad, el doctor pone el foco en las ITS invisibles. Las que no muestran señales de alarma. “Las más peligrosas son las asintomáticas”, afirma. 

“Desde que se contagia el VIH hasta que se enferma pueden pasar años. Y cuando te contagias de la ITS más frecuente, como el virus del papiloma, ni te enteras, no pasa nada durante años”. Por eso, advierte de que “si no vas al ginecólogo y no tienes la buena suerte de tener verrugas genitales, puede no pasar nada en 7 años y desarrollar un cáncer”.

Por eso, pone un ejemplo con el que se topa en la consulta. “Cuando diagnosticas sífilis a una mujer se lleva las manos a la cabeza, pero esto tiene cura”. Y es que como provoca una llaga o úlcera, “se va al medico, y se cura”. Por eso, las que más amenazan son las asintomáticas, que producen daño a distancia, sin sintomatología. El virus del papiloma, Hepatitis B y A, el VIH... 

Falta de educación

La pandemia, y sus consecuencias en la salud mental de la población ha sido otro de los factores que ha hecho que las ITS hayan incrementado, según el doctor Neyro. Y es que “la gente se tira a compensaciones en el corto plazo, y la más placentera y divertida es el sexo. La gente ha cambiado los hábitos y los límites de su frecuencia y forma de tener relaciones”, defiende. 

Además, asegura que la sexualidad está cambiando en los adolescentes. “Hay un acceso muy fácil a la pornografía, y eso supone que tengan hábitos sexuales que antes no existían”. Todos esos factores junto con la falta de una educación sanitaria adecuada es lo que “hace que salgan los datos que salen”, insiste. Y es que asegura que hay un amplio desconocimiento en cuanto a las ITS hoy en día. 

"Hay un acceso muy fácil a la pornografía, y eso hace que los hábitos sexuales cambien"

José Luis Neyro

Y pone un ejemplo gráfico. “El otro día vacuné a un chaval de 21 años de virus de papiloma humano. Le pregunté qué le habían dicho sus amigos y me dijo que pensaban que estaba loco porque eso era de tías”. De hecho, recuerda cuando se hizo la campaña de vacunación hace años, se dijo que solo era para chicas de 13 años que no habían tenido relaciones sexuales. Y según el doctor Neyro, hizo pensar que si habías tenido relaciones no te la podías dar, si eras mayor tampoco y si eras un chico no era para tí. 

Y lo mismo ocurre con las mujeres lesbianas. Según indica el doctor, “más de cinco mujeres lesbianas me han dicho que no se tienen que vacunar porque no tienen relaciones con hombres”. “No hay conciencia de necesidad de cobertura en lesbianas, pero las mujeres pueden transmitir htv, herpes, hepatitis b, hepatitis a...”.

Por otro lado, alude al desconocimiento en cuanto a las precauciones que hay que tomar. “Para evitar las ITS tienes que usar tres preservativos masculinos y uno femenino. Uno para el vaginal, otro para anal, otro cunnilingus y otro para la felación. Cuando lo digo me miran como si estuviera loco, pero es importante saber que con el sexo oral se transmiten ITS”, subraya. 

Revisiones anuales

Asimismo, el doctor además de recordar que el VPH puede desencadenar en un cáncer, advierte de las consecuencias que pueden tener las infecciones de transmisión sexual como la clamidia. “A pesar de ser asintomática puede dañar las trompas y causar infertilidad”. Por eso, insiste en la necesidad de hacerse revisiones, y tomar precauciones: “Medidas de protección, visitas anuales al ginecólogo y educación sanitaria, eso es lo que hace falta”, zanja el doctor Neyro.