El abandono universitario en la Comunidad Foral es más elevado en la Universidad de Navarra que en la Universidad Pública de Navarra. También hay más estudiantes que deciden cambiar de carrera en el centro académico privado que en el campus de Arrosadia. Así se refleja en el último informe Datos y Cifras del Sistema Universitario Español referente al curso 2021-22, que sitúa a la Comunidad Foral en el vagón de cola del Estado con una tasa de abandono del 14,6%, un punto por encima de la media de las universidades presenciales. Tan sólo Asturias, Illes Balears, La Rioja, Galicia y Canarias presentan mayores pocentajes de renuncia. Por otra parte, un 13,5% del alumnado universitario de Navarra, también por encima de la media, opta por dejar la carrera para inscribirse en otra titulación. El abandono universitario tras el primer año, que es cuándo ocurre la mitad de las renuncias, es mayor en la rama de Artes y Humanidades y menor en Ciencias de la Salud.
Un 27,8% del alumnado que se matriculó en algunos de los grados ofertados por la UPNA y la UN en 2015-16 abandonó la carrera antes de terminarla . De ellos, la mitad dejó el sistema universitario de forma definitiva mientras que el 13,2% restante se matriculó en otra carrera bien en la misma universidad o en otra.
La UPNA presenta menos abandono que la UN
Las tasas de abandono y de cambio de estudios difieren sensiblemente siendo más bajas en la UPNA. En este campus, un 13,2% del alumnado abandona los estudios de forma definitiva mientras que el 12,5% decide cambiar de carrera. Estas tasas se sitúan por debajo de la media de las universidades públicas presenciales: 13,6% y 13% respectivamente.
Así, con una tasa global del 25,7%, la Universidad Pública de Navarra se sitúa en el séptimo lugar por debajo de la media de las universidades públicas de Castilla y León, Castilla La Mancha, Comunidad Valencia, Extremadura, Madrid y la Comunidad Autónoma Vasca.
La Universidad de Navarra, sin embargo, presenta unas tasas de abandono y de cambio de estudios superiores no sólo a las de la UPNA sino también a la media de universidades privadas presenciales. Así, el 29,7% del alumnado que ingresó en la UN en el curso 2015-16 abandonó la carrera antes de tiempo. De esos estudiantes, el 15,8% renunció a seguir estudiando en la universidad (frente al 13,1% de la media de las universidades privadas) mientras que el 13,9% restante optó por cambiar de carrera (la media fue del 9,2%).
Primer año, el más delicado
La mayoría de los estudiantes tiran la toalla durante el primer año de carrera. Así, el 14,6% del alumnado abandona los estudios (el informe en este caso no especifica cuántos lo hacen de forma definitiva y cuántos para estudiar otro grado) en el primer año. Otro 10% lo hace durante su segundo año en la universidad y un 3,2% restante decide dejarlo en tercero.
El informe recoge un adelanto de la situación del alumnado que comenzó sus estudios universitarios en el curso 2017-18 y ofrece sólo datos sobre tasa de abandono y de cambio de estudios en el primer año. La cifra total es del 14,5%, de los cuales el 7,4% decide cambiar de carrera y el 7,1% renuncia a la universidad. Por universidades, la UPNA presenta datos de abandono más elevados con un 7,3% de abandono frente al 7% de la UN; y un 8% de cambio de estudios frente al 6,9% de la privada.
A falta de conocer los datos de los años siguientes se podría concluir que o la universidad privada está en el camino de reducir sus tasas de abandono o que en este centro académico las renuncias se concentran en a partir del segundo año.
Por ramas de enseñanza, los mayores porcentajes de cambio de carrera a lo largo de los tres primeros cursos se dan en Ingeniería y Arquitectura (18%)y Ciencias (16,3%) mientras que Artes y Humanidades (29%) seguido de Ciencias Sociales e Ingenieras (21%) son áreas de conocimiento con mayores niveles de renuncia a seguir en la universidad.
