El poder celebrar la Navidad con turrones y un árbol o incluso el disponer de un salón de estar o cocina propia son lujos de los que no dispone la familia de Ababa, que vive con sus dos hijos en una habitación en Pamplona, y en estas fechas tan señaladas, van a tener que adecuarse no solo al espacio sino también al dinero del que disponen

“A pesar de la situación, vamos a intentar celebrar las Navidades de forma cristiana. Mañana iré a la iglesia con mis dos hijos y rezaré para que nuestra condición mejore”, relata Ababa, que sobrevive gracias a una renta garantizada de 400€. Y con tal presupuesto, “no podemos permitirnos regalos. Ya cuesta terminar el mes. Además, ¿dónde pondríamos los regalos?”, cuenta Ababa. 

Dada situación, ella come siempre en la habitación con su hija de 10 años y su hijo de 14, “no haremos nada especial en Navidad”, observa Ababa. 

Ahora bien, ella mantiene la sonrisa porque “podríamos estar peor. Hay gente en la calle y en los hospitales. Nos manejamos”, señala María, sin embargo, ella le pide al 2023 “lo primero de todo salud, y luego, un piso. Cuando mis hijos eran pequeños, no había mucha fricción. Pero ahora que están creciendo, necesitan una habitación propia y un salón donde poder estudiar”, confiesa Ababa, “pero yo no les puedo dar eso ahora mismo”. “Ni siquiera tengo el lujo de poner sencillo un árbol de Navidad, ¿dónde lo pondría y con qué dinero lo pagaría?”, comenta Ababa. 

“Mi marido nos abandonó hace cinco años, cuando estábamos en Madrid, y desde entonces, vamos donde podemos cogiendo las ayudas que nos ofrecen. Hasta encontrar esta habitación y tener la renta, vivíamos con algunas ayudas que nos daban en la Iglesia”, explica Ababa.

La madre de familia reza todos los días a Dios para que les ayude, “no le pido que me ayude a mí si no a mis hijos. Que haga conmigo lo que quiera, pero, por favor, que les ayude a ellos. No podemos seguir aguantando así mucho más tiempo”, explica Ababa. “Mi hijo quiere estudiar pero con tan poco espacio es imposible”, admite Ababa. 

No le pido a Dios que me ayude a mí, sino que se acerque a mis hijos, que lo haga por ellos

Ababa - Madre de dos hijos

 Por otro lado, lleva tiempo solicitando una vivienda de emergencia social en Navarra, “pero parece que no tengo puntos suficientes, no lo entiendo”, observa. Pero si una madre soltera con dos hijos que viven en una habitación y subsisten gracias a una renta garantizada no cumplen los requisitos para entrar al programa de acceso a la vivienda social, la pregunta es quién puede entrar.