La incidencia del cuello de útero invasivo en Navarra se sitúa en 4,5 casos por 100.000 mujeres, similar a los países del norte de Europa. Según los últimos datos disponibles del registro población de cáncer de la Comunidad Foral se diagnostican entre 17 y 23 casos al año, es decir, ocupa el puesto número 16 en frecencia. La tasa de mortalidad ajustada a la población mundial se sitúa en una por 100.000 mujeres.

A nivel mundial, el cáncer de cuello de útero ocupa el cuarto lugar con un 13,1 por cada 100.000 mujeres por detrás del cáncer de mama, colorrectal y pulmón. En el conjunto del Estado ocupa el décimo segundo lugar con una incidencia de 5,2 por cada 100.000 mujeres.

Importancia de la vacuna contra el papiloma

La detección precoz del cáncer de cuello de útero, explican desde el Departamento de Salud, ha demostrado su eficacia y efectividad consiguiendo disminuir la mortalidad de forma significativa, por lo que estrategias de cribado, en combinación con la vacunación, se consideran como formas efectivas de control para la posible erradicación de esta enfermedad.

Aparte del cribado dirigido a mujeres de entre 35 y 65 años, el Departamento Salud mantiene la citología como prueba de detección primaria entre la población de 25 a 34 años y que, como viene siendo habitual, se hará cada tres años en los centros de Atención a la Salud Sexual y Reproductiva de referencia. Se trata de una población a la que se ha ofertado la protección de la vacuna, la otra gran herramienta de prevención contra el virus del papiloma humano, que actualmente se ofrece a mujeres de 12 años y se prevé extender, también, a varones.

Y es que está demostrado el papel causal que la infección por el Virus del Papiloma Humano (VPH) tiene en el desarrollo del cáncer de cuello de útero, por lo que la aplicación de medidas de carácter preventivo primario, como la vacunación, supone un elemento clave para su control, además del uso del preservativo acompañado de educación para una sexualidad saludable

 También sigue activo el sistema de atención a las mujeres en caso de presentar signos y/o síntomas compatibles con un problema de salud a lo largo de toda la red sanitaria.