“La realidad de nuestras aulas es muy diferente a la de hace unos años. Cada vez tenemos una mayor diversidad y las ratios son muy elevadas para poder ofrecer una atención de calidad”. Esta reflexión de una maestra de Primaria del colegio público Mendialdea I, de Berriozar, recoge el sentir de buena parte de los docentes que esta mañana participaron en la concentración celebrada frente a la sede del Departamento de Educación. El profesorado se mostró convencido de la necesidad de salir a la calle “para que se nos vea y se nos escuche” y ha confiado en que la movilización sirva para conseguir sus objetivos. “Está claro que si no salimos seguro que no conseguimos nada”, aseguraron un grupo de maestros del CP Alfonso X El Sabio de San Adrián, que se trasladaron a la capital navarra para participar en la protesta. 

La concentración ha reunido a docentes de buena parte de los colegios públicos de Pamplona y la Comarca así como de otras localidades. La bajada de las ratios ha sido una de las demandas más repetidas por el profesorado. “Es casi imposible atender solo una persona a 25 txikis y darle una respuesta de calidad como debería hacer una escuela pública”, afirmó una maestra del colegio público Mendigoiti, centro en el que hubo que hacer sorteo para ver quien hacía los servicios mínimos. En opinión de esta docente “se gasta demasiado dinero en tecnología y digitalización cuando lo que se necesitan son personas. Deberían invertir más en personal y menos en aparatos”. Otra maestra de la escuela Atargi de Villava ha tildado de “barbaridad” que una maestra atienda a 25 escolares. “Necesitamos apoyos en el aula”, ha remarcado. “En la pandemia se redujo las ratios y se demostró que se funciona mucho mejor”, ha reconocido unas docentes del CP San Francisco, de Pamplona.

En esta misma línea se ha pronunciado un grupo de maestras del CP Virgen Blanca de Huarte quien ha abogado por “una reducción de las ratios, sobre todo en Infantil, y un incremento de los apoyos y los recursos”. “Tenemos una carga burocrática excesiva, mucho papeleo que se ha incrementado con la jornada continua, y eso nos resta tiempo de preparación de las clases y de ofrecer una educación de calidad”, ha opinado una de las maestras de este colegio donde el seguimiento fue superior al 50%.

A esta excesiva sobrecarga se ha referido una maestra del CP Atakondoa de Irurtzun. “Tenemos mucha sobrecarga y nos imponen excesiva formación que, en muchas ocasiones, no tienen sentido”, ha afirmado.

Desde el colegio público Mendialdea I, de Berriozar, un grupo de maestras, varias de ellas veteranas, lamentaron que el actual decreto de distribución equilibrada del alumnado “no ha servido para nada”. “Si los pisos están más baratos en ciertas zonas las personas con más necesidades viven ahí y escolarizan a sus hijos ahí como es lógico”, expusieron estas docentes, quienes consideraron que “como no se puede distribuir por lo menos tendrán que darnos más apoyos y recursos. Cada vez hay más necesidades en el aula. La realidad de las aulas es muy distinta de hace un año y las ratios actuales son muy elevadas para atener una clases en las que cada vez hay más diversidad”.

Estas maestras también se mostraron escépticas con una reducción de la temporalidad “que no es” y han aseverado que la excesiva sobrecarga de trabajo deteriora la atención directa. “Dicen que apoyan a la escuela pública pero es todo de boquilla”, han zanjado.

La reducción de la temporalidad también fue una de las reivindicaciones que citó el grupo de maestros de San Adrián. “La estabilidad de las plantillas es fundamental tanto para poder dar seguimiento a los proyectos como para ofrecer una mayor calidad”, han afirmado. Y el tema del poder adquisitivo también es importante “porque nos bajaron el sueldo y no nos lo subieron”. “Hay que salir a la calle que nos nos vea y se nos oiga. Si no salimos seguro que no conseguimos nada”.

Y una maestra veterana del CP Hermanos Uriz Pi de Sarriguren ha añadido: “Los derechos no caen del cielo, hay que pelarlos”.