“El 3 de mayo, desde Zaporeak llegamos al tope de nuestros fuegos”. Así comienza el comunicado que han leído los portavoces de la asociación sin ánimo de lucro que ofrece comida digna a los refugiados que llegan a Europa, en el que anunciaron que su cocina ha llegado el límite de raciones que puede ofrecer. Por eso, tendrán que ampliar la infraestructura con la que actualmente cuenta en Grecia para poder llegar a más personas.

“Durante estos últimos años la situación en las islas griegas, zona de tránsito migratorio hacia Europa, no ha hecho más que empeorar”, han lamentado, en una situación en la que “miles de personas siguen encontrándose con una frontera impuesta por occidente en la que los derechos humanos y la ética no tienen lugar”. En ese contexto, “en tan solo dos meses la situación de Lesbos ha cambiado radicalmente”. En cuestión de semanas han aumentado a 2.031 las raciones diarias que ofrecen, “porque los habitantes del campo han llegado a 2.800, cuando en los meses anteriores no subíamos de 1.800 raciones”.

“Como venimos anunciando hemos llegado al máximo de capacidad de lo que los fogones de Lesbos pueden cocinar, pero siguen quedándose personas refugiadas sin alimentos, por lo que estamos pensando en alternativas para poder abastecer a todo el campo”, han lamentado los portavoces de Zaporeak. “Queremos llegar a más personas, y para ello tendremos que cambiar la infraestructura de la cocina de Lesbos, aumentar la cantidad de los alimentos que enviamos a Grecia, y organizar más eventos para poder cubrir gastos y tener financiación”, han explicado, y por eso consideran “primordial” la campaña de captación de socios. 

“La realidad migratoria está en constante cambio, y para que Zaporeak pueda adaptarse a las necesidades y retos que van surgiendo, necesitamos una vez más la implicación de la sociedad”, ha solicitado la ONG. Durante el próximo mes se van a volcar “por completo a conseguir socios, mediante publicaciones de videos de personas reconocidas en la sociedad que apoyan a Zaporeak, entrevistas y finalizaremos el domingo 2 de julio con la vuelta del KOXK en Intxaurrondo, un evento solidario y gastronómico que habla mucho de quienes somos y como hacemos las cosas.

“Desde Zaporeak seguimos con fuerza y determinación para hacer llegar alimentos a todas aquellas personas que huyen y buscan una vida mejor y más segura para ellos y sus familias”, ha reivindicado la asociación. Una alimentación “nutritiva y adaptada a sus gustos, necesidades e incluso enfermedades”, han recalcado. Para ello, desde hace 7 años reparten más de 2.000 raciones de comida diarias en la isla de Lesbos.