Amaia García, de 20 años, receptora de una beca Caja Rural, estudia ADE y Economía Internacional en la UPNA aunque este curso lo está realizando en Karlstad, Suecia, “una ciudad muy agradable de unos 60.000 habitantes y con mucho ambiente universitario”.

Suecia no es uno de los países más elegidos por los estudiantes para realizar en el Erasmus y el aspecto de que “fuese menos común” le llamó la atención para elegir destino además de que “siempre me ha dado mucha curiosidad y no es un sitio que fuese a visitar de vacaciones”. Amaia tenía claro que quería vivir la experiencia de vivir un año en el extranjero, incluso fue uno de los motivos por los que se decantó por la carrera que estudia.

Del primer semestre, destaca las diferencias entre los sistemas educativos de ambos países. “Allí hay muchas menos clases, tengo dos a la semana de dos o tres horas de duración y el resto son trabajos para hacer en casa” aunque, por otro lado, “son muchos más exigentes en las correcciones. Hay cuatro recuperaciones pero tienes que hacerlo perfecto”. Amaia vive en una residencia con estudiantes extranjeros, explica que hay unos 10.000 universitarios de los cuáles 200 son internacionales y tan solo 10 proceden de España y han hecho “mucha piña”.

Los mayores retos de un país como Suecia son el idioma y las condiciones meteorológicas. Respecto a lo primero, recuerda que “al principio tenía dificultades para hablar con el conductor del autobús o los cajeros de supermercado”. Destaca también que, al contrario de lo que pensaba, “no habla todo el mundo inglés” aunque es el idioma en el que más se comunica. “Ahora estoy aprendiendo sueco y muy bien. Me parece una mezcla entre inglés y alemán, que ya sé un poco”, cuenta. En cuanto al tiempo, asegura que “estoy pasando más frío en Pamplona que en Suecia, creo que es porque aquí hay mucha más humedad”.

Reconoce que tenía ganas de volver a casa, sobre todo por ver a su familia, aunque está muy contenta con la experiencia y tiene planeado realizar prácticas internacionales en cursos posteriores.