El sindicato ELA ha denunciado este martes que la nueva Ley Foral de Salud abre la puerta a la privatización de la sanidad en Navarra y a "poder despedir" a profesionales de Osasunbidea. El sindicato ha solicitado al Ejecutivo foral que retire el anteproyecto de Ley, que actualmente se encuentra en fase de exposición pública hasta finales de año.

De hecho, este lunes el consejero de Salud, Fernando Domínguez, señaló que el departamento está dispuesto a realizar modificaciones en el anteproyecto y que estudiarán nuevas propuestas con todas las partes. "Nada es innegociable", subrayó Domínguez.

No obstante, un día después, ELA ha presentado un informe contrario a la propuesta de Salud y que incluye un diagnóstico de los problemas de Osasunbidea y sus propuestas para avanzar hacia un sistema de sanidad público de "calidad".

Imanol Pascual, coordinador de ELA en Navarra, Josune Guerra, responsable del sindicato para Osasunbidea, e Iñaki Zabaleta, miembro del Gabinete de Estudios del sindicato, han señalado que el proyecto de Ley Foral de Salud "no cierra la puerta a la privatización y permite despidos".

"El Gobierno de Navarra pretende crear las entidades públicas empresariales de Osasunbidea y del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN), modificando su actual naturaleza jurídica. Esto supone que el personal de Osasunbidea y del ISPLN que se incorpore después, será personal laboral y no funcionarios o funcionarias", han advertido.

ELA ha subrayado que esta ley permitiría al Gobierno "despedir o amortizar plazas en Osasunbidea al igual que en cualquier otra empresa pública o privada".

"Desinversión" en Osasunbidea

Además, el sindicato ha demandado "una apuesta clara por el sistema de sanidad pública" y ha afirmado que "la desinversión continuada en Osasunbidea queda patente en el proyecto de Presupuesto de 2025, que solo crecerá un 1% respecto al crédito definitivo de 2024, pierde 0,2 puntos respecto al conjunto de la economía (PIB) y crecerá menos que la inflación (IPC)".

"Esta falta de inversión provoca que el gasto público en salud en Navarra sea 590 millones de euros menor que la media de la UE-27. Ello se traduce en una pérdida de la calidad en la atención sanitaria", ha señalado.

El sindicato ha destacado que "el ratio de personal médico es un tercio menor que la media de la OCDE, y el ratio de personal de enfermería es la mitad, siendo la situación de la atención primaria especialmente grave".

"La falta de inversión provoca que la calidad del servicio empeore, como se ve, entre otras cuestiones, en las listas de espera y en la espera real, que es superior a la que indican las estadísticas. Todo esto abre la puerta al negocio de la salud privada a quien la pueda pagar", ha afirmado.

ELA considera que "para tener un servicio público de calidad es indispensable tener buenas condiciones de trabajo". "En Osasunbidea, las principales características son una temporalidad del 51,7% (cuando según una directiva europea debería ser menor al 8% y la media de temporalidad en el sector privado es del 18,7%), un 21,1% de parcialidad, y una pérdida de poder adquisitivo del 15,8% en 15 años", ha asegurado.

La carrera profesional

La organización sindical ha afirmado que "a esto hay que añadir la discriminación en la carrera profesional". "El Parlamento de Navarra aprobó en septiembre la ley foral que reconoce la carrera profesional para el personal sanitario de niveles C y D de Osasunbidea. Así se lleva a cabo el contenido del acuerdo suscrito en la Mesa Sectorial con los votos de LAB, SAE, UGT y Afapna. El acuerdo, y en consecuencia, la ley foral, deja fuera de la carrera profesional al 41% del personal de Osasunbidea que no la cobraba: de las 5.200 que no la tenían reconocida, 2.150 trabajadoras y trabajadores de los niveles C y D seguirán sin tenerla", ha criticado.