Unas 1.000 personas con Enfermedad Renal Crónica (ERC) en Navarra necesitan tratamiento de diálisis o trasplante para "poder seguir viviendo", según han destacado desde la Sociedad Española de Nefrología.

En un comunicado con motivo del Día Mundial del Riñón, que se celebra este jueves, 13 de marzo, desde la SEN han subrayado que en Navarra el número de nuevos casos de pacientes (incidencia) con ERC en Tratamiento Renal Sustitutivo (TRS) en 2023 se situó en 129 personas por millón de población (pmp), una cifra "muy inferior" a la media nacional (151 pmp), según los datos del Registro Español de Diálisis y Trasplante (REDYT).

Estas cifras sitúan a Navarra como una de las comunidades españolas con menor tasa de incidencia, sólo por detrás de Castilla y León, Castilla La Mancha y País Vasco. Por su parte, la prevalencia (número total de casos) de pacientes con ERC en TRS en 2023 en Navarra alcanzó las 1.370 pmp, una cifra inferior a la media nacional (1.406 pmp) y también inferior a la prevalencia en la región en 2022. Con todo ello, unas 1.000 personas en Navarra precisan de TRS para reemplazar la función de sus riñones.

La SEN, junto a la Federación Nacional ALCER de personas con enfermedades renales y otras sociedades científicas y organizaciones sanitarias, ha alertado de "la preocupante evolución de la Enfermedad Renal Crónica, que se ha convertido en grave problema de salud pública y sigue creciendo" en España, "donde se estima que afecta ya al 15% de la población, en cualquier estadio de la enfermedad e incluyendo a las personas sin diagnosticar".

A nivel nacional, la prevalencia del Tratamiento Renal Sustitutivo, es decir, el número de personas que están en diálisis o trasplante para sustituir la función de sus riñones, ha aumentado más de un 30% en la última década, y ya son más de 67.000 las personas que están TRS en España. Cada año ingresan en los programas de diálisis y trasplante una media de 7.000 personas, un 25% de ellos a causa de la diabetes.

La ERC es una de enfermedad "muy desconocida por la población, pero que tiene un elevado impacto socio-sanitario y en la calidad de vida de los pacientes, debido en parte a que sus síntomas son poco reconocibles en los estadios iniciales de la enfermedad, lo que dificulta su diagnóstico precoz y tratamiento".

Por ello "es importante implantar programas de detección temprana en la población de riesgo, para detectarla antes de que llegue a sus fases más avanzadas". De ahí que los nefrólogos y los pacientes incidan en que "se realicen más esfuerzos para avanzar en la prevención y diagnóstico precoz de la ERC", que es conocida como la epidemia silenciosa y que tiene una tasa de infradiagnóstico de más del 40%.

Con ello "se frenaría su crecimiento y se lograría prevenir muchos casos, además de detectarlos en estadios más precoces, facilitando así además su tratamiento y un enlentecimiento de la progresión de la enfermedad". El crecimiento de ERC se relaciona con factores de riesgo como la diabetes y la enfermedad cardiovascular (responsables de un 40% de los casos), la obesidad, la hipertensión arterial o el tabaquismo, que en su mayoría podrían evitarse o prevenirse.

El presidente de la SEN, Emilio Sánchez, ha destacado que "hay que lograr que los ciudadanos se preocupen por su función renal y la salud de sus riñones, ya que la ERC es muy silente, y da la cara en muchas ocasiones en estadios avanzados, cuando ya se necesita prácticamente un TRS que reemplace la función renal".

"Pero la buena noticia es que tenemos muy claros los grupos de riesgo y está en nuestras manos actuar sobre ellos, mediante la detección precoz y su tratamiento temprano como estrategia para disminuir su progresión. La principal causa de ERC es la diabetes, y podemos actuar contra ella desde la prevención, la concienciación social y el fomento de un estilo de vida saludable", ha indicado.

Según Sánchez, "con la detección precoz y tratamiento temprano del deterioro de la función renal se puede retrasar hasta en 20 años el ingreso en diálisis o trasplante, y eso se puede lograr con sencillos tests de sangre y orina para medir la creatinina plasmática (y calcular el filtrado glomerular) y la albúmina en orina".

En este sentido, los especialistas abogan por "potenciar la prevención primaria, enfocada a promover un estilo vida saludable, el cese del hábito tabáquico, el control de la obesidad y el ejercicio físico". También ven necesaria "la prevención secundaria, mediante la detección precoz de la ERC y su tratamiento temprano como estrategia para reducir su progresión y complicaciones".

Una detección temprana que consideran "debe promoverse activamente en personas mayores de 65 años, con diabetes, hipertensión arterial, obesidad, antecedentes cardiovasculares y antecedentes familiares de enfermedad renal".

El presidente de la SEN ha advertido de que, "si no se hace nada, para el año 2040, un tercio de las personas mayores de 65 años en España tendrán ERC y esta será la quinta causa de muerte en nuestro país".

Además de potenciar la prevención y el diagnóstico precoz, nefrólogos y pacientes piden "otras medidas clave" como seguir fomentando el trasplante de riñón, "ya que es la mejor solución para los pacientes que necesitan un TRS", y en concreto, en la necesidad de promover más la actividad de trasplante renal de donante vivo, "que ofrece muy buenos resultados en términos de supervivencia del trasplante y reducción de complicaciones, y representa ya el 10% del total de trasplantes de riñón".

"Es necesario apostar decididamente por la diálisis domiciliaria y la mejora de la atención y calidad de vida de los pacientes renales, a través de medidas como la creación y desarrollo de unidades de diálisis domiciliaria al menos en un hospital de cada provincia, la implantación de consultas ERCA (Enfermedad Renal Crónica Avanzada) acreditadas para asegurar la mejor atención sanitaria en fases avanzadas de la enfermedad, promover la diálisis domiciliaria y el acceso al trasplante renal y, sobre todo, la implantación de modelos de diálisis peritoneal asistida, que derribaría muchas barreras culturales que hoy frenan los tratamientos domiciliarios y son claves especialmente para las personas de más edad", ha reivindicado Sánchez.

Por su parte, el presidente de la Federación Nacional ALCER de personas con enfermedades renales, Daniel Gallego, ha remarcado que "desde nuestra organización, hacemos un llamamiento a la población general y no solo a personas mayores o con diabetes, también a los profesionales sanitarios y a las autoridades, para que se refuerce la concienciación y se promueva la prevención y detección temprana, mediante chequeos anuales".

"Cuidar nuestros riñones es proteger nuestra salud y calidad de vida. Es hora de actuar y de saber si están bien nuestros riñones, descubriéndolo a tiempo protegemos nuestra salud renal. Es urgente que se hable más de la enfermedad renal. El diagnóstico tardío sigue siendo un problema grave, y muchas personas desconocen que tienen riesgo. Si tienes diabetes, hipertensión, sobrepeso o antecedentes familiares, es fundamental que revises tu salud renal regularmente", ha añadido.

El Día Mundial del Riñón se celebra este año bajo el lema ¿Están bien tus riñones? Descúbrelo a tiempo protege tu salud renal, e incide en aspectos como la prevención, la detección precoz, el infradiagnóstico, el aumento de la incidencia y prevalencia de la ERC o la necesidad de cuidar la salud renal y fomentar hábitos de vida saludables para reducir sus riegos y su progresión.