Cuatro mujeres investigadoras de las universidades de Navarra han recibido las Becas Fulbright para el curso 2025-2026 que les permitirán enriquecer sus aportaciones para sus ámbitos científicos de la mano de universidades y entidades de aclamado prestigio de Estados Unidos. Dos de ellas, Paula Domínguez y Teresa García, han sido becadas gracias al convenio entre el Ejecutivo foral y la Comisión Fulbright. Mientras, Itxaso Aranguren e Irene Izco lo han logrado en el marco del programa general Fulbright España.
Se trata de un hito que, aunque enorgullece profundamente a Navarra, no resulta sorprendente para la comunidad ya que, como ha apuntado su presidenta, María Chivite, durante el acto institucional de esta mañana en el Palacio de Navarra, “el Informe de Conocimiento y Desarrollo de 2025 calificó a Navarra como la segunda región española en investigación de excelencia”.
Al mismo tiempo, Chivite ha mencionado que "durante décadas, las mujeres hemos recibido un papel secundario en la ciencia”. De hecho, “el 94% de los Premios Nobel tienen nombres masculinos”, ha señalado, lo que significa que, históricamente, ellos han sido quienes han tenido los medios para dedicarse a este ámbito, además de quienes han tenido “la relevancia pública y el reconocimiento”.
Irene Izco: “Vamos a intentar implantar una zona de bajas emisiones allí”
El proyecto de Irene, investigadora de la UPNA en el ámbito de la ingeniería industrial. busca reinventar y hacer más sostenible el reparto de mercancías en las ciudades. Este domingo, la joven investigadora pone rumbo a la Universidad de Portland para implantar la primera zona de bajas emisiones en EE.UU. “Iremos paso a paso”, detalla Irene. “Primero desarrollaremos una en el ordenador y, finalmente, construiremos un living lab, una prueba piloto, con vehículos de todo tipo, generalmente eléctricos, pero también autónomos, como drones, robots…”, desarrolla.
Su intención es terminar la tesis el próximo verano, poder defenderla antes de las navidades del año que viene y permanecer un tiempo en Pamplona, aunque teniendo siempre en mente que “irse fuera es una oportunidad increíble”.
Itxaso Aranguren: “Pretendo traer a Navarra todo lo que aprenda en mi estancia fuera”
De Navarra a la NASA. Ese es el viaje que emprenderá Itxaso, ingeniera agrónoma e investigadora de la UPNA especializada en teledetección, “una ciencia que permite observar superficies terrestres a través de sensores instalados en satélites”, según explica.
Cuando se incorpore al Jet Propulsion Laboratory, Itxaso evolucionará en su forma de interpretar los datos obtenidos, a través de los que “se monitorizan superficies vegetales y se analiza el impacto de catástrofes naturales como incendios o inundaciones”. Después, la ingeniera espera aplicar lo aprendido en Navarra.
"No lo definiría como un sueño, porque es algo que veía tan lejano que nunca me planteé”, admite Itxaso. Aun así, "son oportunidades que se van labrando poco a poco, siguiendo tu intuición y trabajando", concluye.
Teresa García: “Quiero hacer de las empresas lugares más humanos”
Tras hablar con gente a su alrededor que trabaja en despachos y consultorías donde “abundan las tasas de ansiedad y depresión y la falta de admiración por parte de los jefes”, Teresa identificó un problema en un amplio espectro de la juventud. “Creo que el trabajo puede despertar cosas positivas en las personas, y no mermarlas”, dice. Por eso, su tesis pretende “humanizar las empresas y hacer que vuelvan a centrarse en las personas”.
Además, su ilusión por viajar a Estados Unidos para estudiar existe desde hace años cuando, de pequeña, visitó la Universidad de Yale y tocó la estatua de su fundador en busca de suerte. Ahora, años después, aunque en otra universidad (la de Harvard), pero con el mismo prestigio, Teresa dice estar cumpliendo un sueño.
Paula Domínguez: “Irte fuera te presenta nuevas líneas de investigación”
Su ámbito es la biología. Aquí, ella forma parte del Departamento de Tecnología de Alimentos de la UPNA. Durante su estancia en el extranjero, la investigadora desarrollará su tesis en la Universidad de Massachusetts y trabajará “inyectando ozono, un compuesto muy desinfectante, al aceite de oliva para tratar las úlceras por presión de personas que, por su movilidad reducida, pasan mucho tiempo en la cama”, explica la científica.
Su propuesta pretende, además, dar solución a la problemática de la resistencia a los antibióticos, “cada vez más común”. Aunque pretende regresar a Navarra, Paula considera que irse fuera abre puertas a nuevas investigaciones como estas, que indagan en “matrices alimentarias novedosas con fines terapéuticos”, apunta.