El Centro Asociado UNED Pamplona, fundado en 1973, será un curso más el punto de referencia para miles de estudiantes en la Comunidad Foral. La institución cerró el curso pasado con 16.578 matriculaciones y, este año, ha alcanzado ya las 6.487 inscripciones, 2.893 de ellas en enseñanzas oficiales, una cifra similar a la de cursos anteriores. El principal incremento se ha dado en el programa UNED Sénior, que no ha dejado de crecer en los últimos cursos y que batirá un nuevo récord este año académico 2025-2026, al haber llegado ya a las 3.594 inscripciones. Todo esto son cifras provisionales, ya que la matrícula permanece abierta hasta el próximo 4 de noviembre.
UNED Pamplona celebró este martes en el aula Fernando Remacha del Edificio El Sario el acto académico de apertura del curso 2025-2026, presidido por el Consejero de Universidad, Innovación y Transformación Digital del Gobierno de Navarra, Juan Luis García Martín, y por Jesús de Andrés Sanz, Vicerrector de Centros Asociados de la UNED.
Durante el acto, el Secretario General del centro, José Miguel Laco Irigoyen, leyó la memoria académica del curso pasado y destacó que la misión de la UNED es “que todos los ciudadanos y ciudadanas tengan acceso flexible al conocimiento relacionado con la educación superior, mediante la modalidad de aprendizaje semipresencial y a distancia, y al desarrollo profesional y cultural de mayor interés social”.
Como explicó, UNED Pamplona pudo cumplir un curso más su propósito y alcanzó la cifra de 16.578 matrículas en toda su integridad (tanto enseñanzas regladas como cursos no oficiales). “Destaca la alta satisfacción que muestran nuestros estudiantes, con una valoración global de 81,61 puntos sobre 100, una cifra parecida a la del año pasado”.
El centro, con 127 tutores y tutoras, ofrece 30 grados, 21 grados combinados, dos dobles grados, 75 másteres oficiales, 33 microgrados, 3 micromásteres, 16 cursos de idiomas, cursos de acceso a la universidad y una importante oferta de extensión universitaria. Además, UNED Pamplona acogió 9.553 pruebas presenciales el año pasado.
Grados más demandados
Para este curso 2025-2026, los estudios del Grado en Psicología son, una vez más, los más demandados, seguidos de Derecho y de Geografía e Historia. Por edad, se ha comprobado un cambio sustancial respecto al curso anterior, ya que el mayor número de estudiantes de grado se ha concentrado, en primer lugar, en la franja de 25 a 29 años y, posteriormente, en la franja de 20 a 24 años. “También nos llena de profundo orgullo comprobar algo que consideramos que hace especial a nuestra universidad y es el hecho de que 45 estudiantes cursaron estudios reglados a una edad igual o superior a los 70 años, cuatro de ellos con más de 80 años”, destacó José Miguel Laco.
Del total de estudiantes matriculados, un 56% fueron mujeres y un 44% hombres. Respecto a su procedencia, alrededor del 87% son de la Comunidad Foral.
Por su parte, la directora de UNED Pamplona, Teresa Imízcoz, aludió en su discurso a la renovación de proyectos “para impulsar el progreso individual y colectivo”. “Es un momento de ilusiones y esperanzas, de emoción y de compromiso con el deber responsable que tenemos como comunidad universitaria: el de poner nuestra capacidad al servicio de la sociedad y el bien común”.
La directora puso como ejemplos la Cátedra de Inteligencia Emocional UNEDPamplona-Fundación Caja Navarra, única en España, y el nuevo programa para migrantes. “En la Cátedra de Inteligencia Emocional han participado en sus actividades más de 8.000 personas en tan sólo dos años, señal de la necesidad imperiosa que existe en nuestra sociedad. La matriculación en actividades del Centro ha crecido un 608% en los tres últimos cursos. Pero estas cifras sólo son importantes si son el reflejo de repensar la educación como ejercicio democrático, manteniendo siempre su orientación hacia el bien común”.
Navarra aumentará en 1,3 millones su inversión en el centro a distancia en 2026
El consejero de Universidad, Innovación y Transformación Digital, Juan Luis García, anunció en su intervención en el acto de apertura de la UNED que, en los futuros presupuestos de 2026, la financiación del Centro Asociado en Pamplona continuará la tendencia al alza de años anteriores. “Ya supone casi un 16% más de lo que se destinaba en 2021 y, este 2026, aumentará la inversión en más de 1,3 millones de euros con respecto a la de este año”.
“El Gobierno de Navarra ha apoyado siempre la misión de la UNED: ofrecer una educación de calidad, accesible y adaptada a las necesidades de cada estudiante. Creemos que la educación a distancia es una herramienta fundamental para garantizar el acceso a la formación universitaria sin importar las barreras geográficas, laborales o personales”.
Así, puso en valor el papel del centro en la “democratización del conocimiento y la igualdad de oportunidades”. García recordó algunos programas como UNED Sénior, que abre las puertas de la universidad a las personas mayores de 50 años. También mencionó los convenios firmados por el centro con el Departamento de Vivienda, Juventud y Políticas Migratorias, en los que se destinan 86.500 euros, una cifra que se ha incrementado un 44%, a mejorar las competencias de la población migrante. Por último, recordó el acuerdo con el Departamento de Educación para la formación en inteligencia emocional de profesorado y estudiantes.
“Es necesario actualizar la Lorafna a la realidad social de la Navarra actual”
Cristina Zoco Zabala, doctora en Derecho y profesora de UNED Pamplona, reflexionó en su lección inaugural sobre la necesidad de actualizar la Lorafna (Ley Orgánica 13/1982, del 10 de agosto, de Reintegración y Amejoramiento del Régimen Foral de Navarra).
Como explicó la doctora, de la inicial Lorafna quedan, tras 43 años de vigencia, asuntos que siguen pendientes de transferir a la Comunidad Foral. “Es necesaria la actualización de la Lorafna y su adecuación a la realidad social y al sentir de la ciudadanía navarra del S. XXI”.
“Es decir, que la ley acomode sus propuestas a las necesidades de esta sociedad plural, diversa, formada, culta y participativa con la que hoy contamos; y a una ciudadanía más exigente en su calidad de vida que demanda medidas orientadas a conquistar nuevos espacios de igualdad real y efectiva”.
Así, señaló que académicos y expertos han colaborado sugiriendo propuestas de reforma que persiguen la mejora permanente de la calidad institucional del autogobierno de Navarra y la mejora de la democratización de los procesos de decisión al servicio de los cada vez más dinámicos procesos sociales de transformación.
“Se ha propuesto incorporar algunos órganos de funcionamiento interno del Parlamento como la Junta de Portavoces o la Comisión de investigación e incluir el Consejo de la Transparencia”. También se han sugerido avances en la democratización de las instituciones y la inclusión de un catálogo de derechos que asegure igualdad de trato y oportunidades de grupos e individuos en la vida real. “La pluralidad de Navarra exige cuidar especialmente el derecho de la ciudadanía a expresarse libremente en castellano o euskera, impidiendo discriminaciones por razones lingüísticas”, aseguró.
“Por último, creo que repensar y reescribir el texto de la Lorafna utilizando un lenguaje inclusivo es una buena oportunidad de seguir contribuyendo al logro de una sociedad más justa e igualitaria”.
“Estudiar a los 50 años ha sido un acto de terquedad contra la comodidad”
“En la UNED, entre aulas y pantallas, descubrí que estudiar a los cincuenta es un gesto político: no para repetir dogmas, sino para afilar el pensamiento crítico, ese cuchillo sin mango que corta las cadenas invisibles del conformismo”. Esta fue una de las reflexiones que dejó Oskar Sada, graduado en Educación Social por UNED Pamplona, en su discurso en el acto de apertura académica del centro.
“El momento en el que ahora me encuentro con todas vosotras es la culminación de todo un proceso, de un camino lleno de aventuras al que llegué a una edad madura, desde unos márgenes que hasta este momento no me habían permitido una educación reglada”.
El estudiante recordó su paso por la UNED desde el inicio. “Comenzó con el acceso, en el que la posibilidad de una relación dialógica con el profesorado y el apoyo recibido me permitieron establecer un vínculo renovado con el aprendizaje. Ese vínculo me ha hecho ser tenaz y aplicado, confrontando muchas veces mis miedos y disfrutando casi siempre de los saberes que me he ido encontrando”.
“Quiero subrayar además algo que quizá valore más que los libros: el apoyo mutuo entre quienes compartimos este camino. En esta etapa de mi vida he comprobado que la verdadera riqueza de la universidad está en la comunidad que somos capaces de construir. Aquí he sentido cómo la cooperación sustituye a la competitividad, cómo nos fortalecemos compartiendo dudas, materiales, experiencias. Donde se nos empuja a competir, nosotras, nosotros y nosotres elegimos ayudarnos”.
“Estudiar aquí, a esta edad, me ha confirmado la certeza de que pensar críticamente es bailar en el borde del abismo. Y esa danza es la mejor arma contra quienes quieren que no pensemos, que no dudemos, que no riamos, que no seamos. La educación es entonces celebración, guerrilla simbólica, y también abrazo: la oportunidad de encontrarnos distintos, en comunidad, forjando un nosotros resistente y deseable”.
Diplomas y reconocimientos
Durante el acto de este martes, 48 alumnos graduados en el curso 2024-2025 recibieron su diploma. Anita Hell (ADE), Iván Maestre Moneo (ADE), Luis Francisco Pezonaga Montes-Jovellar (ADE), Miguel Tabuenca Blanco (ADE), Raquel Valencia Sola (ADE), Sergio De la Osa Hernández (Ciencias Ambientales), Mónica Muñoz Fernández (Ciencias políticas y de la administración), Juan Ángel Pérez Llamosas (Ciencias políticas y de la administración), Joseba Covo Guevara (Criminología), Jacobo Recarey Lema (Criminología), Tatiana Zarranz Oreste (Criminología), Cristina Mercedes Batalla González (Derecho), Javier Castejón Cayuela (Derecho), María Mallén Correas (Derecho), Adán Uharte Rey (Derecho), Ana Valera Massó (Derecho), Ion Donalisio Artieda (Economía), Vanessa Baztán Santa Eulalia (Educación Infantil), Nekane Torre Pérez (Educación Infantil), Ivette Belina Condori Hinojosa (Educación Social), Carmen Martínez Labarta (Educación Social), Oskar Sada Muruzabal (Educación Social), Sandra Villaseca Gómez (Educación Social), Ekhiñe Zurbano Ramos (Educación Social), Jesús Zúñiga Aldaya (Física), Sergio Colomo Sarriguren (Geografía e Historia), Unai Tomillo Gutiérrez (Geografía e Historia), Francisco Javier Cirauqui Armendáriz (Historia del Arte), Miguel Ángel Lumbreras Cabrerizo (Historia del Arte), Félix Mangado López (Historia del Arte), Paula Peñas Jiménez (Historia del Arte), María Pilar Santos Gil (Historia del Arte), Carlos María San Felipe Donlo (Historia del Arte), Leyre Landa Labiano (Pedagogía), Joana Antón Felipe (Psicología), Jorge Luis Arruiz Ayesa (Psicología), Guillermo Ayala Ezquerrena (Psicología), Alberto Calvo Anibarro (Psicología), María Rosario Jiménez García (Psicología), Paula Platero García (Psicología), Marianela Ponce Giménez (Psicología), Jorge Puertolas Tadeo (Psicología), Sara Redondo Expósito (Psicología), Idoia Sánchez Cerdán (Psicología), José Ignacio Sánchez Jiménez (Psicología), Leire Sarratea Sanzberro (Psicología), Beatriz Sola Aguinaga (Psicología), Joaquín Montané Serrano (Sociología), Juan Ramón Alduán Urdiain (Trabajo Social) y Garazi Azcona Loinaz (Tranajo Social).
Además, se ha concedido la Insignia de Honor del Centro a los docentes Pedro Arregui Olaverri y José María Uribe Oyarbide, por sus cuarenta años de vinculación al centro. Se ha distinguido también a Carmen Innerarity Grau, Teodoro Roldán Marrodán, Pablo Arocena Garro y Juan Jesús Viscarret Garro, y, a título póstumo, a Juan Carlos Ochoa, por sus veinte años de dedicación a la institución.