La Policía Municipal de Pamplona ha detenido a un varón de 49 años, A.J.B.L., como autor de un delito de agresión sexual a una niña de 8 años en un domicilio de Barañáin. El Juzgado de Instrucción número 5 ha decretado este jueves su ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza, investigado por un delito de agresión sexual a menor de 16 años, penado en el Código Penal con entre 10 y 15 años de prisión.

Los hechos ocurrieron en agosto del año pasado cuando el hombre detenido se llevó a su domicilio a la menor, cuando esta se encontraba jugando en un parque. En la vivienda consumó la agresión sexual sobre la niña.

Tras tener conocimiento de los hechos, agentes de UPAS (Unidad de Protección y Atención Social) de Policía Municipal de Pamplona, especializada en investigar delitos contra las mujeres y los menores de edad, inició una investigación que permitió identificar y localizar al supuesto autor de los hechos.

El hombre detenido esta semana fue puesto este jueves a disposición del Juzgado de Instrucción número 5 de Pamplona, que se encontraba de guardia cuando ocurrieron los hechos, cuya magistrada ha decretado su ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza como autor de un delito de agresión sexual.

Reconocido por la menor 

En la rueda de reconocimiento practicada este jueves, “a pesar del tiempo transcurrido”, la menor ha “reconocido y señalado”, sin ningún tipo de duda, “al investigado como autor de los hechos denunciados”, asegura la jueza en la resolución judicial.

En la comparecencia, el Ministerio Fiscal ha solicitado el ingreso en prisión provisional del imputado, petición a la que se ha adherido la acusación particular. La defensa, por su parte, ha abogado por la puesta en libertad y ha planteado que se interpusieran medidas menos gravosas.

Elevado riesgo de fuga 

En la resolución judicial, que puede ser recurrida, la jueza considera pertinente la prisión provisional para asegurar la presencia del investigado en el proceso, ya que existe un elevado riesgo de fuga. El imputado carece de domicilio y cambia de residencia con mucha frecuencia.

Según expone la magistrada, ha sido muy difícil localizarlo para su detención, lo que demuestra que no tiene arraigo familiar ni social. “Tampoco tiene trabajo, vive de una prestación social”, apostilla.

Asimismo, la jueza considera adecuada la prisión provisional dada la gravedad de los delitos que se investigan y las posibles penas a imponer. También porque es necesaria la protección de la víctima, especialmente “vulnerable” dada su corta edad, así como para evitar la reiteración delictiva.  

Coherente y sin contradicciones

En cuanto a los indicios de criminalidad, la magistrada señala que, en la prueba preconstituida realizada este jueves, los hechos han sido relatados “de forma coherente” y “sin contradicciones” por la menor.

La víctima ha manifestado que, cuando estaba en un parque infantil, el investigado le dijo que le invitaba a un helado. De esta forma se la llevó a su domicilio, donde la agredió sexualmente. Según recoge el auto, la amenazó con matarla si contaba a alguien lo sucedido. “Todo esto es relatado por la menor con multitud de detalles, tanto de los hechos, la forma en la que la agredió, como de la descripción de la vivienda y de la habitación donde la llevó”, apunta la jueza.

En su declaración, el investigado ha reconocido que en agosto vivía en el domicilio de Barañáin donde la menor señala que ocurrieron los hechos, pero ha negado haberla agredido sexualmente.