Efectivos del Grupo de Investigación y Protección (GIP) de la Policía Local de Málaga han detenido a un hombre de 55 años como presunto autor de un delito de homicidio en grado de tentativa, tras impedir, gracias a su oportuna intervención, que acabase con la vida de su madre, una mujer impedida de 87 años a la que estaba asfixiando con ambas manos en el cuello.

Los hechos tuvieron lugar sobre las 09.15 horas del pasado domingo 14 de mayo en calle José Ortega Luque, en la que están ubicadas las dependencias del GIP, donde policías locales atendieron una llamada en la que se comunicaba que se oían fuertes voces con insultos por parte de un hombre y gritos de una mujer, sin saber precisar con exactitud la vivienda de la que trascendían, por lo que los agentes se dirigieron con premura hasta el bloque, permaneciendo en silencio para intentar averiguarlo.

Ante ello, a pesar de no escuchar nada en varios minutos, los policías locales permanecieron en el lugar a la vez que hacían gestiones para descubrir el inmueble en el que se producían los hechos denunciados, pudiendo oír en un momento dado como de una de las viviendas de la primera planta trascendían gritos en los que un individuo insultaba a una mujer, ha indicado la Policía Local en un comunicado.

En concreto, escucharon con claridad como decía: "Ya me voy de aquí" a la vez que abría la puerta, volviéndose y dejándola abierta sin llegar a percatarse de la presencia de los agentes, al tiempo que gritaba: "Pero antes te voy a matar".

Los agentes del GIP se dirigieron hacía la vivienda, observando desde la puerta como el individuo tenía agarrada fuertemente por el cuello con las dos manos y zarandeándola, con clara intención de asfixiarla, a una anciana, que resultó ser su madre, la cual se encontraba sentada en un sillón del salón, todo ello mientras continuaba gritándole que la iba a matar.

Ante el peligro que corría la vida de la mujer, una pareja de policías locales entraron rápidamente en el domicilio, siendo necesario el uso de la fuerza para separarlo de la víctima, para lo que contaron con el apoyo de otros dos compañeros, siendo finalmente reducido y evitando de ese modo que pudiera culminar el matricidio.

Así, los policías locales asistieron a la víctima, que respiraba con dificultad, encontrándose sollozando, muy nerviosa y asustada, procediendo a calmarla y a solicitar asistencia sanitaria, manifestándoles, cuando pudo articular palabra: "Me quería matar. Me quería matar. Me habéis salvado".

Los policías locales también localizaron el monedero abierto de la víctima en el salón, comprobando que el individuo estaba en posesión del DNI de la misma, ya que, al parecer, se encontraba como autorizado en su cuenta bancaria, aprovechando ese hecho para sacar todo el dinero que podía en los primeros días de cada mes, sin el consentimiento de ella.

Ante los hechos, los policías locales procedieron a la detención del hombre, sobre el cual no existía denuncia anterior por malos tratos, y a su posterior traslado a dependencias policiales, siendo, posteriormente, puesto a disposición judicial.