Una villavesa, que circulaba en esos momentos sin pasajeros y solo con el chófer en el interior, ha sufrido la rotura de una luna durante la noche de este viernes, después de que fuera alcanzada la cristalera por una piedra arrojada desde la cuesta de Labrit. El vehículo se encontraba en marcha en dirección hacia el barrio de la Txantrea. El incidente se produjo poco antes de las 23.00 horas y afectó a un vehículo que cubría la línea N3, entre Labrit y la Magdalena. 

Al parecer, la persona que pudo arrojar la piedra se encontraba refugiada en la zona boscosa, aledaña al carril bici que recorre dicha cuesta. Una patrulla de la Policía Municipal de Pamplona se personó en el lugar pero no encontró al autor o autores del acto vandálico.

Desde el comité de empresa de TCC mostraron su condena "al acto de vandalismo ocurrido esta pasada noche y reclamamos la necesaria actuación tanto de Mancomunidad, empresa y Policía para poner fin a estos actos que ponen en riesgo tanto a los choferes como a usuarios del transporte urbano comarcal".