Osasuna Promesas reanuda la competición recibiendo al SD Logroñés en Tajonar (21.00 horas), en un duelo que cierra la jornada y que mide a dos rivales directos que luchan por el mismo objetivo, que no es otro que conseguir la permanencia en Primera RFEF para la próxima temporada.

Es por ello que conseguir la victoria se antoja esencial para los hombres de Santi Castillejo, que antes de que el balón eche a rodar aventajan en tres puntos a su rival de esta noche (22 puntos tienen los rojillos, por los 19 con los que cuenta el cuadro riojano), y cuatro con los puestos de descenso de categoría que marca el Tarazona con 18 unidades en su casillero.

Comenzar con buen pie es el objetivo del filial rojillo, que aspira a conseguir los tres puntos que se le resistieron en su último partido de 2023, cuando visitaron Las Llanas para medirse al Sestao y no pudieron despedir el año con tres puntos, al caer 2-1 ante el conjunto que dirige Aitor Calle, rompiendo así una serie de cuatro partidos sin caer derrotados, en los que firmaron tres empates y un triunfo.

Santi Castillejo, entrenador de Osasuna Promesas, analizó cómo ve al equipo en la previa del encuentro: “Cuando te vas de vacaciones siempre está la incógnita de saber cómo vuelve el equipo. Hemos entrenado bien y estamos preparados. Nos enfrentamos a un Logroñés que ha cambiado de entrenador y también existe esa incógnita de cómo van a plantear ellos el encuentro. A pesar de ello, nosotros debemos estar a lo nuestro y saber imponer nuestro ritmo”.

Además, el entrenador del filial rojillo señaló que “en esta categoría siempre hay partidos igualados, donde hay pocas ocasiones y las defensas se imponen a los ataques. Es clave que estemos despiertos en ambas áreas en todo lo que tiene que ver con el balón parado y las segundas jugadas. El fútbol siempre te puede sorprender, pero en principio esperamos un partido cerrado con pocas ocasiones”.

Por parte riojana, Aitor Larrazábal, que se estrena en el banquillo blanquirrojo, aseguró en la previa del encuentro que su equipo viene a Pamplona “a demostrar que es capaz de hacer frente y ganar”.

Tras cuatro entrenamientos al frente de su nuevo, el vizcaíno, con más de 500 partidos en sus estadísticas, ya tiene ganas de competir: “Han sido días de mucho conocimiento y además rápido, para intentar que ellos absorban los conceptos que hemos podido transmitirles y nosotros, también para saber un poco más de ellos. Ha ido bien, en la medida que creemos que tiene que ir y ya estamos para competir, a un día de la competición, que es lo que todos teníamos ganas de que ocurriera”.

En cuanto al Promesas, el preparador vizcaíno, explicó que los navarros “no son un filial al uso”, ya que juegan “más directo”. Mucho de sus jugadores son experimentados y ya no son sub-23. También ha aportado los ingredientes para lograr la victoria: “Necesitamos tener presencia en mediocampo y llegar al área rival, porque si no, no podemos hacer gol. Hemos trabajado bastante el aspecto ofensivo: cómo llegar, cómo presionar para intentar robar. Tenemos que ser un equipo intenso y ambicioso. Eso pasa porque los jugadores quieran y vamos a hacer todo lo posible para que ocurra”.