El miércoles tomaron posesión los consejeros de PP y Vox del nuevo Gobierno de coalición de la Junta de Castilla y León, en lo que supone el primer Ejecutivo español en el que ha entrado la ultraderecha, y que cuenta con nueve hombres y tres mujeres entre sus miembros. Un desequilibrio que Antonio García Ferreras no se cansó de criticar en su programa Al rojo vivo, asegurando que está "a la cola de la paridad".
El reelegido presidente autonómico, el popular Alfonso Fernández Mañueco, defendió la composición de su Gobierno asegurando que "son los mejores hombres y mujeres para este Gobierno", y eso encendió a Ferreras, que cargó contra él. "Luego se justificará diciendo: 'Yo soy un gran hombre de la paridad porque tengo hijas'. Y sólo encuentra tres mujeres capaces de formar parte de su Gobierno. ¡El resto son hombres".
Si Ferreras estaba indignado con Mañueco, más indignada aún se mostró más tarde Mariló Montero con Ferreras, como mostró en un largo post que subió a Instagram, atacando duramente a su compañero de profesión. "Ferreras le ha respondido con dolorosa ironía a Mañueco que 'no ha sido capaz de encontrar más mujeres con méritos'. En la mesa de Ferreras, donde hay ocho sillas, como ocho consejerías u ocho ministerios, él tiene sentados a siete hombres y a una mujer que además no es contertulia sino una redactora que va dando paso o algún apunte informativo, pero ninguna mujer ha sido invitada para opinar. Será que Ferreras no es capaz de encontrar a ninguna mujer con méritos para debatir sobre los temas que aborda cada día. Ve la paja en el ojo ajeno y no en el suyo propio".
A partir de ahí, la estellesa ha querido dejar claro que está tan en contra de la mesa de mayoría de hombres de Al rojo vivo como de la falta de paridad del Ejecutivo castellanoleonés. "Ambos, tanto el Gobierno de Mañueco como Ferreras, no saben el verdadero daño que hacen a la sociedad. A España. A todas las mujeres preparadisimas que hay en nuestro país y a las que no se les da su merecido y necesario sitio. Que en el siglo XXI no haya paridad en España, en la política, en los medios de Comunicación, es humillante, es un grave insulto. Y lo mas grave, está ciego porque, como Ferreras, lo critica y no lo practica sin sentir la mínima preocupación".
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