Muchos kilómetros, poco dinero. Algo que nuestras compañeras de ‘runnking’ casi no pueden soportar.
Sabemos que hacer deporte es una de las prácticas más beneficiosas para nuestra salud. No obstante, estar bien preparado, en ocasiones nos pesa el bolsillo.
Las zapatillas de deporte son uno de los artículos más vendidos. Un estudio de mercado ha demostrado que se venden 25 pares de zapatillas por segundo, alrededor del mundo.
Este tipo de artículos, no es precisamente barato, por ello, debemos cuidarlas con el fin de poder alargar su vida.
Fe de vida
Cuando adquirimos una de estas prendas confiamos en, que, esta, nos ayude a superar todo tipo de terrenos.
Lamentablemente, eso significa ensuciarse, sudar e incluso estropearse. Las zapatillas una de las pertenencias de nuestro armario más delicadas.
Además, siempre nos gusta lucir con un aspecto reluciente, algo muy poco probable en este tipo de prendas.
Por ello, son varias las marcas y fabricantes que tratan de aconsejar a los compradores, entre todas las formas y técnicas de cuidado.
- Trate de cepillarlas después de cada uso. La mayoría de veces únicamente habrá una fina capa de polvo.
- Jamás meta este tipo de prendas en la secadora. Este electrodoméstico no está preparado para estos materiales. Tampoco las ponga cerca de un radiador, luz de sol directa o secador de pelo.
- Es recomendable usar un desodorante especial, siempre durante la noche.
Otra opción es usar bicarbonato, talco para bebés, cáscaras de cítricos, alcohol con algodón o incluso las bolsitas de té, ya usadas.
Esto ayudará no solamente al mal olor, si no que absorberá la humedad y posibles bacterias.
Por último, los fabricantes recomiendan no almacenar las zapatillas en un lugar demasiado caluroso, puesto que la forma podría ablandarse y perder su forma.
Del mismo modo, tampoco dejarlas en un lugar demasiado frío, ya que algunos materiales pueden endurecerse.
