El gran poeta Mario Benedetti sostenía que ‘cinco minutos bastan para soñar toda una vida’, así de relativo es el tiempo. Pero esta historia dura algo más.

Un año después del fusilamiento de Mussolini, en 1946, se construye en la vieja Italia una presa hidroeléctrica, que, trajo consigo un cataclismo histórico. La desaparición de Fabbriche di Careggine, el pueblo fantasma.

La aldea italiana lleva 75 años sumergido en el fondo de las aguas de la isla. No obstante, los viajeros más curiosos han tenido cuatro oportunidades de volver a caminar por su superficie, en 1958, 1974, 1983 y 1994. La oportunidad es única, ya que durante este año, el embalse se vaciará y se aprovechará para su limpieza y drenaje.

Por otro lado, en cuanto a lo mitológico, se dan ciertas leyendas, que, relatan la presencia de misteriosos seres bajo las profundidades que fascinan la imaginación de los lugareños.

La posibilidad de visitar un pueblo fantasma medieval, que, aparece ocasionalmente y por un periodo breve, favorece gratamente el turismo italiano.