Las adicciones comportamentales, como el juego, las apuestas con dinero o el uso problemático de internet, son algunas de las preocupaciones sociales más increpantes en España; especialmente entre el público joven, ya que este sector emplea estos motivos como una forma de socialización con su entorno más próximo. En lo que respecta a Navarra, uno de cada tres adolescentes entre 14 y 18 años reconoce haber jugado con dinero en el último año; tanto en la modalidad online como presencialmente. De acuerdo con los resultados que el Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra ha obtenido a partir del III Plan de Prevención de Drogas y Adicciones 2018-2023, que recoge los datos de la encuesta ESTUDES, la edad de inicio en el juego es de 15,1 años en el caso de juego presencial y 15,2 años en el juego online.

En este sentido, los integrantes del Equipo de Adicciones reconocen que ha habido una mejora clara, puesto que ha habido una tendencia descendente en la edad de inicio; mientras que en 2018, los adolescentes comenzaban a jugar presencialmente con 14,6 años y en línea con 14,9 años, los datos que se mostraron en 2021 reflejaban que se había conseguido retrasar la edad hasta los 15 y 15,4 años, respectivamente. En cuanto a l formato, a pesar de que la tendencia por lo digital se encuentra al alza en detrimento del juego presencial, la forma tradicional prevalece como el modo más habitual, ya que se incluyen actividades como bingo o loterías. No obstante, “preocupan ambas modalidades porque los jóvenes juegan con dinero online en mayor medida que la población adulta”, señala Mikel Razkin, educador social e integrante del Equipo de Adicciones de Gobierno de Navarra. De hecho, esta diferencia es significativa, ya que tan solo el 6,8% ha jugado dinero en línea en contraposición con el 56,6% de la población de entre 15 y 64 años que ha jugado presencialmente.

Diferencia entre sexos

Por otro lado, llama también la atención la diferencia entre sexos; frente al 48,1% de los chicos han jugado al menos una vez en los últimos 12 meses (27,5% presencial y 16,3% online), el 17,8% de las chicas han jugado con dinero (concretamente, 13,6% presencial y 4,4% online). En cuanto a la preferencia por la tipología de juego, también se percibe una escisión: por un lado, se puede observar que algunas de las actividades más populares en el público masculino son las apuestas deportivas (52,3%), las tragaperras (30,5%) o las quinielas de fútbol (27,5%). Por otro lado, las chicas optan por juegos como el bingo (58,1%), las loterías y bonolotos (28,8%) o las loterías instantáneas (22,1%).

A pesar de que la frecuencia no es exagerada porque la mayoría de los jóvenes juega anualmente (más de la mitad, mientras que, diariamente, el 12,9% lo hace de forma online y el 5,1% de forma presencial; semanalmente, el 6,5% y el 10,3%) sigue siendo una cifra que asustan y preocupan; especialmente porque “son edades muy vulnerables. En este punto vital es cuando se empiezan a adquirir hábitos y costumbres de las que luego es muy difícil salir. Además, estamos hablando de que hay menores que están apostando cuando no está permitido. Un chaval de 14 años no puede apostar por motivos cerebrales y, sin embargo, lo está haciendo”, explican desde Salud Pública.

Presupuesto

Asimismo, el presupuesto que un adolescente destina diariamente a esta adicción suele ser inferior a seis euros (47% en línea y 64,4% presencialmente). Sin embargo, los datos muestran que uno de cada tres adolescentes invierten hasta 30 euros diarios en el juego. Incluso, hay un pequeño porcentaje de la población joven navarra (5% para la modalidad en línea y 0,9% para la presencial) que este último año han llegado a invertir cada día más de 300 euros. “No es lógico que haya chicos que se estén gastando sus pagas en apuestas deportivas en lugar de salir a la calle. Nos preocupa mucho porque llegará el momento en el que crezcan y lleguen a gastar la mitad de sueldo en el juego. Y todo es consecuencia de que empezaron cuando eran muy pequeños y no tuvieron conciencia del peligro”.