lisboa - Un Ejecutivo “reforzado políticamente”, con diecinueve miembros, entre ellos cinco caras nuevas, arropará al primer ministro portugués electo, António Costa, en una legislatura difícil en la que los socialistas gobernarán en solitario, y en minoría, buscando pactos puntuales entre la izquierda.

Costa ha buscado un equipo con “mejores condiciones” tras los resultados de las elecciones del pasado día 6, que dieron a los socialistas una victoria holgada, pero a falta de diez escaños para conseguir la mayoría absoluta.

El nuevo gabinete, en el que repiten catorce ministros, refuerza “el núcleo central del Gobierno para que el primer ministro y el titular de Negocios Extranjeros, Augusto Santos Silva, puedan asegurar plenamente la conducción de la Presidencia de la Unión Europea”, según un comunicado de la oficina de Costa.

En el equipo desaparecen también los “parentescos” entre altos cargos que la pasada legislatura dieron lugar al llamado “familygate” que desgastó al Gobierno.

Reforzado, el titular de Economía, Pedro Siaza Vieira, un hombre muy próximo a Costa, que asciende a “número dos”, sustituirá al primer ministro en su ausencia y asumirá también el área de Transición Digital.

El peso que gana Economía va en detrimento del “superministro” de Finanzas, Mario Centeno, jefe del Eurogrupo y considerado una pieza clave en el llamado “milagro portugués” de la pasada legislatura.

las mujeres, en aumento En el nuevo equipo aumenta el número de mujeres, con la incorporación de cuatro caras nuevas: Alexandra Leitão (Modernización de Estado y Administración Pública), Ana Mendes Godinho (Trabajo y Seguridad Social), Ana Abrunhosa (Cohesión Territorial) y Maria do Céu Albuquerque (Agricultura).

Los cambios, dijo Costa en una breve declaración tras presentar su gabinete al presidente de la República, Marcelo Rebelo, responden a los cuatro objetivos estratégicos.

Esas prioridades, agregó, se centran en el cambio climático, Medio Ambiente, transición digital, Economía y desigualdades y demografía. - Efe