bruselas - El presidente francés, Emmanuel Macron, propuso ayer como comisario europeo al exministro de Economía y presidente de Atos, Thierry Breton, después de que el Parlamento Europeo rechazara su primera opción, la exministra de Defensa Sylvie Goulard.

La elección de Breton ha sido “discutida y acordada” con la futura presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, según fuentes del Elíseo citadas por Le Monde. En su entorno, resaltan la competencia del exministro en la cartera que Francia espera que ocupe, la de Industria y Mercado Interior, ya que fue para la que se designó a Goulard.

Breton es presidente de Atos, la multinacional tecnológica francesa, desde 2009 y anteriormente fue presidente de Thomson y de France Télécom.

En declaraciones desde Helsinki, Von der Leyen señaló que invitará “lo antes posible” al candidato francés para poder mantener con él “la entrevista oficial y profundizar sobre lo que espero”. La alemana precisó que eso incluye “un enfoque moderno de lo que es el mercado único”, según DPA.

Reunión con la CE Fuentes del equipo de Von der Layen confirmaron que la presidenta electa de la Comisión ya ha invitado al candidato francés para un encuentro en los próximos días.

Por otra parte, el diario Le Figaro informó de que Breton no eran la primera opción de Macron para ocupar la plaza dejada vacante por Goulard, sino el actual negociador jefe de la UE para el brexit, Michel Barnier.

Según el diario, desde el Elíseo se habría contactado en los últimos con Barnier pero se habría puesto como condición para su nombramiento como comisario el que renunciara a su pertenencia al Partido Popular Europeo (PPE), del que forma parte como miembro de Los Republicanos. Sin embargo, Barnier habría rechazado “renunciar a su familia política” a sus 68 años, según una persona de su entorno.

Pese a que Macron haya propuesto ya al candidato francés para el nuevo ejecutivo comunitario, Von der Leyen no puede cerrar aún a su equipo, ya que está pendiente de los nuevos candidatos de Rumanía y Hungría, ya que ambos fueron rechazados por el Parlamento Europeo. - E.P.