PAMPLONA. La portavoz parlamentaria de Geroa Bai, Uxue Barkos, se ha mostrado convencida este viernes de que hace coordinación entre administraciones en esta crisis por causa del coronavirus, pero ha criticado la inercia a la hora de tomar medidas.

Durante el pleno que ha convalidado los decretos de medidas urgentes en materia social, sanitaria y económica, Barkos ha señalado que hay prácticas evaluables y se ve que algunas "son mejorables", por lo que ha abogado "por la coordinación d recursos y no por un mando único".

Navara y Madrid no son lo mismo y a su juicio no mejora resultados una dirección centralizada por ejemplo para la compra de EPIs, test de coronavirus o respiradores, como tampoco en las restricciones para las despedidas de las personas fallecidas al margen de la pandemia.

Ha instado además medidas frente a las consecuencias económicas que dejará el Covid-19 para asegurar rentas durante la crisis y la vuelta a la actividad después, y para ello ha pedido "liquidez para las rentas salariales" más allá de lo que los ERTEs pueden paliar, porque en su opinión quien garantice esas rentas saldrá de la crisis.

Uxue Barkos ha apoyado asimismo medidas para la actividad empresarial y ha defendido una emisión de bonos públicos de Navarra y, para superar la crisis social, ha subrayado que hay que dar confianza y articular soluciones conjuntas porque lo individual es "inoperante", lo público "debe tomar el liderazgo democrática y momentáneamente sobre lo privado" y "empezar a diseñar un nuevo mundo"

"Coordinación toda, inercia ninguna cuando las medidas que se plantean no son la mejor solución para la sociedad navarra", ha subrayado, y se ha preguntado también por los recursos que llegan a las residencias de ancianos y la coordinación con los ayuntamientos para esta finalidad.

Tras precisar que esto "no es una guerra, es una pandemia, una situación dura y extrema pero no un campo de batalla para extraer réditos de ningún tipo", Barkos ha apelado al esfuerzo y la colaboración ante un escenario "no conocido antes" en el que el papel del Parlamento sigue siendo legislar y controlar las decisiones del Gobierno.

El objetivo, ha dicho, es intentar frenar los fallecimientos y los contagios y para ello ha confiado en los criterios de las autoridades sanitarias "sin mirar atrás ni mucho menos mirar atrás mes y medio, porque ya llegará el momento de la crítica constructiva", aunque sí ha pedido al Ejecutivo información para los grupos.