- La crisis que asfixia a la monarquía española sigue encendiendo el debate político. Con un monarca emérito Juan Carlos I acechado por la Justicia y el rey Felipe VI sin poder taponar la vía de agua abierta en la jefatura del Estado, dos partidos antagónicos en su ideología, PP y ERC, se enzarzaron ayer en un cruce dialéctico. Así, y mientras los populares defendieron el legado de la Corona durante los últimos 40 años, calificando al rey actual de "irremplazable", los republicanos catalanes avisaron de que no será suficiente con sacar "la manzana podrida" del cesto de la Corona.

Corren malos tiempos para la Zarzuela. Al desgaste de la imagen de la institución, que ha hecho que cada vez más españoles cuestionen la utilidad de la monarquía, la Fiscalía del Tribunal Supremo ya ha dado pasos para que Juan Carlos I llegue a sentarse en el banquillo de los acusados por sus tejemanejes en Suiza con las mordidas de Arabia Saudí en el AVE a la Meca. Y a ese argumento se agarró ayer el portavoz de ERC en el Congreso Gabriel Rufián para instarle a personarse ante la Justicia para ofrecer las pertinentes explicaciones. Rufián también lanzó un aviso a Felipe VI: no bastará con sacar del cesto "la manzana podrida", como tampoco sirvió de mucho deshacerse de su cuñado, Iñaki Urdangarin, cuando el escándalo del caso Nóos. "Les va a salir mal esta operación de sacar al emérito de la monarquía", avisó. "Todo el mundo recuerda cómo en su momento el malo era Urdangarin" y las víctimas eran el "pobre Juan Carlos y el pobre Felipe", señaló.

ERC vaticina que el debate sobre la monarquía, que ha explotado hace relativamente poco tiempo, no es un problema coyuntural, sino estructural. "Es un problema endémico que tarde o temprano habrá que afrontar" , valoró Rufián. "Que este señor -en referencia a Juan Carlos I- cambie de piso o de casa no deja de ser una operación de maquillaje; lo mínimo sería que se presentara ante un juez y si no lo hace aquí lo acabará haciendo en otro país", profundizó. El orador republicano fue más allá al reclamar una investigación en el Congreso al respecto, si bien ve insalvable el veto de un PSOE que, pese a sus titubeos, ha respaldado a Felipe VI al ensalzar su "ejemplaridad" desde que accediera al trono, pese a catalogar de "inquietantes y perturbadoras" las noticias que han ido llegando sobre los negocios ocultos del rey emérito.

El debate abierto por la Corona española también suscitó ayer la reacción del PP, por boca de su portavoz en el Senado, Javier Maroto, quien efectuó una numantina defensa de la institución, sobre todo de un Felipe VI del que ensalzó su "ejemplaridad". Con una monarquía parlamentaria a la que los españoles deberían de estar "muy agradecidos", acusó directamente a Podemos, que comparte gobierno con el PSOE de Pedro Sánchez, de estar detrás de la situación. "Creo que la aversión que genera la monarquía en una parte del Gobierno es evidente porque no se ocultan detrás de ello. No sé exactamente si alguien tiene duda de que tenemos un Gobierno donde a muchos de sus integrantes les gustaría un cambio de régimen, pero un cambio de régimen completo y concreto", resumió.

En todo caso, Maroto no quiso entrar a valorar si Juan Carlos I debería de responder ante la Justicia por sus tejemanejes. Tampoco de si Zarzuela debe o no tomar medidas para apartar el emérito de Zarzuela y dar así por zanjada la crisis. Pero volvió a entrar de lleno contra Podemos y su líder, Pablo Iglesias. El dirigente morado llamó a no ignorar la controversia abierta, pero el popular considera que "no habría nunca un presidente de la República que tuviese las claves de lo que pide Iglesias y de lo que pide buena parte del Gobierno que pudiese dar satisfacción a las necesidades del país de una forma moderna, europea, inteligente y estable como está haciendo Felipe VI en España".

"Les va a salir mal esta operación de intentar desvincular la manzana podrida del cesto"

Portavoz de ERC en el Congreso

"La aversión que genera la monarquía en una parte del gobierno es evidente, no se ocultan"

Portavoz del PP en el Senado