PAMPLONA. Proyecto Hombre Navarra recibió en 2018 un total de 385 nuevas demandas de atención en su servicio de Acogida y Valoración Inicial, que representa la 'puerta de entrada' a los centros de tratamiento. Fruto de este total de demandas atendidas, fueron 215 las personas que finalmente ingresaron en alguno de sus recursos de tratamiento.

Además de las demandas recibidas en su sede, Proyecto Hombre ofrece un servicio de atención individual en la prisión de Pamplona mediante entrevistas a personas reclusas con el fin de "promover y facilitar su acceso a nuestros tratamientos como medida alternativa al cumplimiento de su condena en la prisión, cuando legalmente fuera posible". En este servicio han tenido un total de 45 demandas durante el año 2018.

Proyecto Hombre ha informado en rueda de prensa de que el año pasado el número de personas con problemas de adicción que recibieron tratamiento en la entidad fue de 375. A esta cifra hay que sumar los familiares y allegados de estas personas que participaron en el tratamiento, y que constituyen un grupo de aproximadamente 800 personas más.

Según ha precisado, la intervención con familiares y allegados constituye un elemento clave en el tratamiento en Proyecto Hombre e incluye actividades de carácter individual y grupal a lo largo de todo el proceso.

De los 375 casos atendidos, 215 se corresponden con nuevas admisiones a tratamiento en 2018 (76 en Proyecto Hombre y 139 en Aldatu), mientras que el resto se trata de personas procedentes del año anterior. Este número de nuevas admisiones es muy similar al del año anterior, "presentando variaciones muy poco significativas". El 35,4% de las admisiones se produjeron en el programa de Comunidad Terapéutica (Proyecto Hombre), frente al 64,6% del Programa Ambulatorio (Aldatu).

PERFIL DEL ATENDIDO.

La gran mayoría de las personas atendidas eran hombres (82%), frente a un 18% de mujeres. No obstante, en 2018 aumentó la presencia de mujeres respecto a años anteriores, "algo especialmente significativo puesto que mantenemos la impresión de que las mujeres tienen más dificultades para acceder y para permanecer en los tratamientos, lo cual nos exige hacer un esfuerzo para facilitar esta accesibilidad".

La edad media de las personas atendidas fue más baja que el año anterior, situándose en los 37,5 años. Por géneros, sin embargo, existen diferencias significativas. Mientras que entre los hombres la edad media en 2018 fue de 35,9 años, entre las mujeres fue de 44,6 años. "Nos seguimos encontrando por tanto con que las mujeres acceden más tarde al tratamiento, y además lo hacen presentando un mayor deterioro", han dicho.

Precisamente, han continuado, en 2018 pusieron en marcha un grupo de trabajo con el objetivo de "facilitar la accesibilidad al tratamiento de las mujeres y su permanencia en los centros de tratamiento, mejorando su efectividad".

Las tasas de desempleo entre las personas atendidas impulsaron a la entidad a desarrollar en 2017 su servicio de inserción sociolaboral.

SUSTANCIA PRINCIPAL QUE MOTIVA LA DEMANDA.

El alcohol continúa siendo la principal sustancia referida por las personas usuarias como motivo de la demanda, seguido de la cocaína, las anfetaminas y el cannabis. Estos datos se refieren a la sustancia principal de consumo referida por las propias personas demandantes de tratamiento.

Sin embargo, han detallado que "cuando evaluamos el problema al detalle nos encontramos en la mayor parte de los casos un consumo simultáneo de varias sustancias que en un alto porcentaje de casos se corresponderían de forma independiente con criterios diagnósticos de abuso o dependencia para cada una de ellas".

Así, por ejemplo, el 76,9% de las personas atendidas en el programa ambulatorio en 2018 presentaban problemas con más de una sustancia, siendo el alcohol y el cannabis, por este orden, las sustancias-problema que más comúnmente acompañan a la sustancia motivo de la demanda.

Respecto a las diferencias en función del género, el alcohol representa la droga principal que motiva la demanda tanto en hombres como en mujeres, si bien en el caso de los hombres los estimulantes considerados en su conjunto (cocaína más anfetaminas/speed) superan al alcohol como droga principal. En el caso de las mujeres, sin embargo, el alcohol constituye la demanda principal con mayor claridad, representando el 59% de los casos.

ADICCIONES SIN SUSTANCIA.

Desde Proyecto Hombre han informado de que en 2018 desarrollaron su programa de tratamiento para personas con adicción al juego, con el apoyo del programa Innova Social, impulsado por la Fundación Caja Navarra y la Fundación La Caixa. En el marco de este proyecto, han continuado, "logramos atraer a un buen número de personas afectadas por esta problemática en nuestro programa ambulatorio, llegando a representar el 11% de las admisiones a tratamiento".

Han destacado "la importante asociación existente entre la adicción a las drogas y los problemas asociados al juego". En concreto, en 2018 realizaron un estudio entre sus personas usuarias a partir del cual detectaron que el 34,4% de las personas atendidas en sus recursos por consumos de drogas presentaba también un problema con el juego, ya fuera en forma de 'Juego Problema' o en forma de 'Juego Patológico'.