pamplona - Está al frente del servicio de Geriatría del Complejo Hospitalario, que el año pasado atendió a 1.862 personas con una edad media de 88 años, y sostiene que “todo el mundo es susceptible de hacer determinadas intervenciones de ejercicio adaptadas a sus circunstancias clínicas”. El doctor Nicolás Martínez Velilla considera que uno de los grandes retos “es universalizar la aportación de la Geriatría en todos los entornos de Navarra” y aboga por la creación de, al igual que hay un Área del Corazón, de un “Área del Envejecimiento”.

Cerca del 20% de la población tiene más de 65 años y se prevé que en dos décadas el porcentaje suba al 25%. ¿Envejecemos bien en Navarra?

-En Navarra somos privilegiados. De hecho, la última noticia que ha salido en los medios ha sido que la esperanza de vida en mujeres es no solo de las más altas de España, sino que a nivel internacional también es altísima. Además, una muy buena noticia que iba vinculada a esa cifra es que ya no solo la esperanza de vida, sino la esperanza de vida libre de discapacidad. Ya no es cuestión sólo de vivir más años, sino de vivir con calidad de vida; eso era lo importante.

¿Cuándo se considera una persona anciana?

-Para entrar en el servicio de Geriatría exigimos una edad mínima de 75 años, pero probablemente la mejor definición de anciano es cuando pierdes las ilusiones, la curiosidad, las ganas de vivir... Eso es lo que realmente marca el paso a ser un anciano.

¿Sería conveniente que en los centros de salud hubiera un geriatra del mismo modo que hay un pediatra para la población infantil?

-El médico más importante para la población, seas niño, anciano o a cualquier edad, es siempre el médico de Atención Primaria. Pero si tienes la posibilidad de un acceso rápido a una consulta con un geriatra te permite ser eficiente a la hora de solicitar consultas, preguntar dudas, gestionar pruebas complementarias, sobre todo determinados aspectos que son igual más específicos. Imagínate una persona con una demencia, un trastorno conductual muy severo, si tienes ese contacto con el geriatra te permite agilizar, a veces incluso te permite no derivar y, cuando tienes que derivar, te permite que sea una derivación sin pasar por urgencias. Entonces, el geriatra es importante como consultor para los médicos de Atención Primaria. De hecho, estas consultas aumentan de forma exponencial.

Ha sido nombrado vicepresidente de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología y miembro del Board de la Academia Europea de Medicina Geriátrica, ¿cuál es el nivel de la Geriatría en Navarra?

-Somos innovadores a nivel de investigación en España y a nivel internacional con temas de ejercicio. El problema de la Geriatría en Navarra es que está creciendo mucho en corto espacio de tiempo y no se está extendiendo de forma homogénea a todos los entornos de Navarra. Por ejemplo, en Estella no hay Geriatría y en Tudela solamente hay un geriatra para toda la Ribera. En cambio, en Pamplona somos once médicos que el nivel que aportan es bueno, sobre todo a nivel científico es un nivel bastante bueno.

Son pioneros en la prescripción de ejercicio físico a mayores hospitalizados. ¿Por qué dieron ese paso? ¿Qué conclusiones han obtenido?

-El paso era obligatorio. Si trabajas con personas mayores te das cuenta del importante deterioro secundario a la hospitalización; no es una alternativa, hay que hacerlo. Y las consecuencias es que conseguimos modificar la trayectoria de estas personas que ingresan y, en vez de desarrollar un deterioro funcional o cognitivo tan importante, les permitimos salir del hospital en mejores circunstancias.

Con los resultados del último estudio en el que participa, abogan por “cambiar la hospitalización tradicional, basada en el reposo en cama, para pasar a otra que reconozca el importante papel de mantener la capacidad funcional y la función cognitiva. ¿Qué medidas habría que implementar? Una es este circuito.

-Vamos dando pasos. Una cosa es el ejercicio activo que hemos preparado, que es cuando les bajamos al gimnasio, y otra cosa ya es el ejercicio pasivo. ¿Por qué? Porque la trayectoria de estas personas si no hacemos algo es de deterioro. Es casi una obligación en el sistema sanitario el fomentar este tipo de actividades y yo creo que se puede extrapolar ya no solo a personas mayores, sino a otros entornos, como los quirúrgicos, oncológicos, un montón de patologías que pueden beneficiarse de estrategias similares. Los beneficios son evidentes prácticamente desde el minuto cero. - M.P.M.