pamplona - Desde hace dos años, la venta de tabaco en Navarra sigue creciendo pese a las advertencias de las autoridades sanitarias que cada cierto tiempo alertan de los efectos perjudiciales para la salud y el incremento de casos de cáncer, entre otras enfermedades relacionadas directamente con este consumo. Este incremento de las ventas se produce tras el descenso del consumo que se venía registrando en los últimos 20 años fruto de las políticas públicas de prevención iniciadas en 1994 y que habían logrado descender 12 puntos la tasa de personas fumadoras en la Comunidad Foral.

A finales del pasado mes de junio, los estancos y otros establecimientos expendedores de tabaco autorizados habían vendido en torno a 800.000 cajetillas de 20 cigarrillos más que en el mismo mes del año anterior. El año 2018 también cerró con un incremento de las ventas respecto al año precedente, en concreto las 45,6 millones cajetillas vendidas en 2017 se elevaron a 46,4 millones en las Navidades de un año después.

Así se desprende de los datos publicados por el Comisionado para el Mercado de Tabacos (CMT) que es el organismo autónomo dedicado a esta materia y dependiente del Ministerio de Hacienda. Según los últimos datos correspondientes al mes de junio de este año, el consumo en Navarra aumentó en todas las modalidades: cigarrillos, puros, tabaco de liar y tabaco de pipa. Destaca en este incremento, el tabaco de liar cada vez más extendido principalmente entre la población juvenil -por el precio sobre todo- , cuyo consumo ha subido en un año en 6.336 kilos (de 59.328 a 65.664).

A la vista del incremento de ventas, también sube el consumo del tabaco de pipa al venderse 1.312 kilos más que en junio de hace un año (de 3.721 kilos vendidos en junio de 2018 pasa a los 5.033 anotados en junio de 2019). No es menos abultado el incremento de los puros cuyo consumo pasa de 23,2 millones en junio de 2018 a 23,3 millones en junio de 2019, tras un descenso de las ventas de este producto en los últimos años.

Comparando los datos de ventas desde los últimos cuatro años (2016) cabe destacar que entre 2016 y 2017 se produjo un importante descenso en el consumo de cigarrillos (de 48,3 millones de cajetillas vendidas en 2016 bajan a 45,6 millones de cajetillas en 2017 para, de nuevo, subir a 46,4 millones las ventas en 2018). También descienden ligeramente las ventas de puros en este periodo (de 50,5 millones de unidades en 2016 a 50,3 millones en 2017 y a 47,6 en 2018).

menos puros Las otras dos modalidades de tabaco (liar y pipa), por el contrario, experimentan un paulatino incremento desde 2016. En concreto, de los 113.446 kilos de tabaco de liar vendidos en 2016 se ha pasado a 126.612 en 2017, y de los 6.232 kilos de tabaco de pipa vendidos en 2016 se ha pasado a 7.953 dos años después.

Navarra mantiene esta tendencia al alza que también se da en el conjunto del Estado donde, en el interanual de junio, se constata un incremento en el consumo de cigarrillos (de 1.078.049.218 cajetillas se ha pasado en un año a la venta de 1.078.564.988); en el de tabaco de liar (de 2.823.359 a 2.900.140 kilos) y en el de pipa (se 420.047 se ha pasado a 587.505 kilos). De acuerdo con los datos del Comisionado del Tabaco, han descendido también en el último año las ventas de puros. En concreto, a junio de 2018 se habían vendido 1.011.955.433 puros mientras que un año más tarde esta cifra baja a 983.031.820.

baja la tasa 12 puntos en 20 años Estos datos del mercado contrastan con los recogidos por las autoridades sanitarias de Navarra que el pasado mayo, con motivo del Día Mundial sin Tabaco, informaron del positivo descenso de la tasa de personas fumadoras en los últimos 20 años, cuando empezaron las políticas públicas de prevención del consumo de tabaco, iniciadas en 1994 en Navarra. Según informó Salud, el porcentaje de personas fumadoras en Navarra ha descendido 12 puntos en las dos últimas décadas, al pasar de 31,5% en el año 2000 al 19,5% actual, según la Encuesta de Condiciones de Vida de Navarra de 2017, la última que ha sido publicada. Aunque se trata de un dato positivo, el hecho de la existencia de prevalencias por debajo del 15% en los países nórdicos indican que “todavía existe un amplio margen de mejora”, indican fuentes del Departamento de Salud.

Según la última Encuesta de Condiciones de Vida de Navarra (2017), el 52,2% de la población mayor de 14 años nunca ha fumado anteriormente. Por el contrario, el 22,3% de la población fuma, en concreto el 19,4% lo hace diariamente y el 2,9% de forma habitual. La edad media a la que se comienza a fumar en Navarra es a los 20,2 años. El perfil de la población fumadora corresponde a hombres (60,9% de los casos) y menores de 40 años (un 63,7% de los casos). Si se comparan estos resultados con los de ediciones anteriores, se observa que disminuye la proporción de personas que fuman, del 29,6% en el año 2005 al 22,3% en 2017. Por sexo, con respecto a los datos del año 2012, disminuye la proporción de mujeres fumadoras (4,4 puntos) en mayor medida que la de los hombres (1,6 puntos).

Según el Departamento de Salud del pasado mayo, la prevalencia del tabaquismo, por debajo del 20%, se da en los estratos socio educativos más desfavorables y se considera fundamental reforzar la atención a las y los menores de edad, donde se ha reducido la brecha de género, y especialmente a las que chicas que en esas edades de inicio consumen tabaco más que los chicos.

El incremento de las ventas, a la vista de los datos del Comisionado para el Mercado de Tabaco cambia esta tendencia a la baja en el consumo.

Llamamiento de la OMS. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha reclamado a los Gobiernos de todo el mundo que prohiban la publicidad, promoción y patrocinio del tabaco en exposiciones y conferencias internacionales, a fin de garantizar que sus eventos y programas estén libres de tabaco y que sus actividades y participantes no estén patrocinados por empresas tabacaleras.

Instituto Nacional del Cáncer. Según este organismo, el tabaco es la causa principal de cáncer y de muerte por cáncer. La gente que usa productos de tabaco o que está regularmente alrededor de humo de tabaco en el ambiente (humo de segunda mano) tiene mayor riesgo de cáncer debido a que muchos compuestos químicos dañan el ADN.

9.700

La industria tabaquera supone una gran fuente de ingresos a las arcas del Estado, aunque conlleva gasto sanitario. Esta industria genera en el Estado español 9.715 millones en tributos al año, casi el 1% del PIB. De ellos, 7.475 millones se originan por los impuestos especiales; 1.974 millones por el IVA; 127 millones por las cotizaciones sociales; 104 millones por el IRPF y 35 millones por el impuesto de sociedades