- Los balcones fueron ayer un clamor de aplausos en homenaje a la enfermera de 52 años del hospital de Galdakao fallecida por el coronavirus, la primera víctima mortal entre el personal sanitario de Osakidetza y también la primera en el Estado. Los vascos se unieron en una ola de solidaridad, volviendo así a reconocer el titánico esfuerzo de miles de enfermeras anónimas en primera línea de combate contra el virus. La profesional sanitaria murió en la noche del miércoles en la UCI del hospital de Basurto tras permanecer seis días ingresada. “Ha sido un duro golpe para el que no estábamos preparados porque ha golpeado el alma del sistema sanitario público vasco”, confesó ayer, visiblemente afectada, la consejera de Salud, Nekane Murga en su comparecencia para facilitar el balance del COVID-19.

Este fallecimiento se une al de otras doce personas en las últimas horas, con lo que el total de muertos con coronavirus en Euskadi ya alcanza los 53. En total, hasta las ocho de la tarde del pasado miércoles se habían registrado 217 nuevos positivos, con lo que la cifra total de contagios es de 1.190 casos, de los que 455 permanecen hospitalizados.

La primera profesional de Osakidetza fallecida desde que se declaró la crisis sanitaria provocó ayer una gran conmoción. Nadie levantaba cabeza en los centros sanitarios. Símbolo de la agotadora lucha de los sanitarios contra el coronavirus, desde el hospital de Galdakao, donde trabajaba la enfermera fallecida, se lanzaba un sentido pésame a la familia y un llamamiento a la ciudadanía; “Deben permanecer en sus casas; es la mejor arma para contener la epidemia”. “Tómenselo en serio por favor. Los pacientes están muy mal. Esto es grave”.

Y es que Euskadi registró por segunda jornada consecutiva el mayor aumento de casos positivos del virus, 217 frente a los 208 del día anterior. En concreto, hay 455 personas ingresadas, 102 más, y 18 que habían resultado infectadas ya han superado la enfermedad. Álava sigue siendo el territorio más afectado por el patógeno, con 621 positivos, 76 más; 224 personas están hospitalizadas y 35 han fallecido. Bizkaia acumula 393 positivos, 96 más, 177 hospitalizados y 13 muertes, mientras que Gipuzkoa tiene 176 positivos identificados (45 más), 54 hospitalizados y cinco fallecidos.

La consejera de Salud lamentó la muerte de la enfermera por esta pandemia que Osakidetza “comenzó a sentir en uno de sus centros, Txagorritxu, un duro golpe que nos hizo reorganizarnos y unirnos”. “Hoy, el coronavirus golpea el alma del sistema, sus profesionales, y reconozco que no estábamos preparados para este varapalo”, afirmó. Asimismo reconoció al conjunto de trabajadores de Osakidetza por su gran labor. “La sociedad lo sabe, lo reconoce y lo agradece”, aseguró.

La máxima responsable sanitaria aseguró que “este nuevo aumento máximo de infectados en la comunidad autónoma demuestra la gravedad y excepcionalidad de la situación”. Al mismo tiempo, Murga remarcó que “todo contagio que evitemos supone eliminar una cadena de nuevas personas infectadas”. “Lo que prevenimos hoy en cifras se refleja en varios días o quizá en semanas”, advirtió, para señalar que los expertos indican que “aún no hemos alcanzado el pico de mayor intensidad en la enfermedad”. Por ello volvió a apelar a la “responsabilidad de la ciudadanía”. Asimismo rechazó detallar si se están produciendo ya muertes por coronavirus en pacientes que no sufrían patologías graves previas.

Tras tener conocimiento de la fatal noticia de la enfermera fallecida, sus compañeros mostraban todo su apoyo y los sindicatos solicitaban a la plantilla que porte un crespón negro durante los dos próximos días y que cuelgue trapos negros desde las ventanas. Hay que recordar que unas 17.000 personas componen la plantilla de enfermería en Euskadi que son el pilar fundamental de los cuidados en estos días tan trascendentales y están en primera línea de batalla contra el virus.

Por su parte, el Colegio de Enfermería de Bizkaia, al que la fallecida pertenecía, transmitió a sus familiares, allegados y compañeros su condolencias y su solidaridad de parte de los de 8.500 colegiados y colegiadas del territorio. Este organismo agradeció “la extraordinaria labor profesional, valiente y comprometida, que están realizando los profesionales sanitarios, y en particular, la profesión enfermera, en su labor de atención a las personas infectadas y en su esfuerzo por mantener la correcta asistencia sanitaria en unas condiciones nunca antes vistas de estrés al sistema sanitario y sociosanitario”.

El Colegio reiteró asimismo la importancia de contar con todas las medidas de seguridad que eviten el riesgo biológico en el trabajo de los profesionales sanitarios. “El fallecimiento de la compañera enfermera demuestra una vez más el clamor de la profesión para el reconocimiento, en todos los aspectos, de las circunstancias de peligrosidad a las que habitualmente se exponen miles de enfermeras en nuestro país”.