Se han convertido en un puntal para resistir la crisis sanitaria. Profesionales clave para dar respuestas especializadas. En tiempo récord el Gobierno foral habilitó esta especie de hospital de campaña telefónico donde se hace un triaje a los pacientes desde el otro lado del aparato. Se encargan de él 34 profesionales de Enfermería del servicio de Urgencias Extrahospitalarias que trabajan ahora de manera excepcional en unas oficinas de la Escuela de Seguridad de Beriáin. No cabían en otra parte.

Allí reciben 1.200 llamadas al día, una demanda que ha ido a más conforme transcurren los días porque hay más personas infectadas y, por tanto, también más ciudadanos en riesgo o que deban adoptar precauciones y medidas de aislamiento respecto al infectado.

No cierran, ni apagan la línea, al contrario, atienden las 24 horas los siete días de la semana. Nueve profesionales durante el día, dos que atienden las llamadas nocturnas. Son otras de las responsables de que la crisis no genere dudas y se lleve en casa lo mejor posible.

Este Consejo Sanitario responde en el 948 290 290 y en el correo electrónico consejosalud@navarra.es y, en uno o en otro, valora si el interlocutor, por lo que describe, presenta síntomas leves y se le recomiendan autocuidados o aislamiento en el domicilio, o en el caso de apreciar síntomas moderados o graves derivan al paciente al centro de salud o al 112, donde se encuentra otra enfermera específica de este organismo, por si fuera necesaria una hospitalización. Pero este Consejo Sanitario no ha visto la luz ante la aparición del COVID-19. En realidad surgió en 2014, lo atendían ocho enfermeras por las tardes de lunes a viernes y de 9 a 21 horas durante los fines de semana y se encargaban de aconsejar y recomendar pautas y realizar un seguimiento a aquellos pacientes pluripatológicos, con dolencias graves, crónicas... que tenían cerrado su centro de salud. Ahora, la obligación ahoga y abre otro frente. Reciclan conocimientos a diario, se ponen a la vanguardia en el estudio del coronavirus, en los nuevos protocolos que aparecen y, así, trasladan con poso y conocimiento a los ciudadanos que telefonean al servicio el asesoramiento oportuno. "La información que se manejaba antes de la crisis sobre el Covid era mínima. Por eso ahora estudiamos a contrarreloj para conocer todas las novedades que se van descubriendo", explica Paula López, enfermera del Consejo.

Pero en una situación perentoria como la actual, de incertidumbre o cuando no, de desesperanza, con el trabajo, quien lo conserve, sostenido a puntadas, con los niños en casa encerrados, las personas ancianas en riesgo, un país entre tabiques, con ese caldo de cultivo no es de extrañar que no todo el mundo que utiliza este servicio lo haga porque presenta alguna sintomatología relacionada con el virus. "Nos hacen consultas de todo tipo. Nos piden respuestas administrativas, nos dicen cómo tienen que proceder con el parte de baja de las empresas o cómo hacer con la mutua, y otras muchas relacionadas con ayudas o subvenciones sociales por la preocupación que genera esta situación. Pero en realidad este servicio se ofrece para la demanda puramente sanitaria, para aquellas personas que tengan una sintomatología leve relacionada con el virus, para los familiares que convivan con una persona contagiada, para guiar a las personas vulnerables y a los grupos de riesgo a evitar acciones contraproducentes o para ofrecer medidas de autocuidado y aislamiento", detalla Paula López, una de las enferemeras del Consejo.

A su lado, Beatriz Ágreda, jefa de Unidad de Servicio de Urgencias Extrahospitalarias del centro Doctor San Martín, también advierte de que precisamente los pacientes que eran sus demandantes habituales antes de la pandemia -es decir, pacientes oncológicos, con múltiples patologías...- "ahora nos llaman cada vez menos, quizás conscientes de la situación, pero les seguimos atendiendo y les derivaremos al recurso oportuno", expone.

Y no por ser repetidos hasta la saciedad, este reportaje va a dejar de mencionar la lista de consejos que ellas reparten a diario. ¿Cómo saber si un enfermo de COVID-19 está grave o moderado? "Los síntomas para una mayor alarma son la dificultad respiratoria, un empeoramiento general del paciente y la fiebre alta. Si alguien presenta esos síntomas, que contacte con su médico de Atención Primaria o con el 112. Y que lo haga con celeridad en caso de ser un grupo de riesgo como mayor de 60 años o con hipertensión, diabetes o enfermedad grave".

Un bloque grueso de los interlocutores que marcan el teléfono se corrresponde del coronavirus con profesionales sanitarios, policiales, de emergencias o personal de residencias de mayores. La primera línea de batalla. "Nos llaman con frecuencia sobre todo porque tienen dudas acerca de cómo actuar ante algún contagio o porque han empezado a percibir algún síntoma. Para ellos se ha habilitado una línea especial dentro de este Consejo sanitario. Lo mismo ocurre con aquellas personas que nos exponen algún problema psicológico derivado del estado de confinamiento. Nosotras tratamos de tener una escucha activa con esas personas, pero también se ha habilitado una línea donde van a recibir atención psicológica especializada", responde López, quien, por cierto, sigue prestando trabajo en Urgencias Extrahospitalarias. Allí reconoce que se han evaporado "las atenciones por problemas leves tanto en niños como en adultos. Quien acude es porque sufre algo de importancia y es más grave".

Las enfermeras del Consejo se afanan en cumplir con lo que pregonan. Es decir, para comenzar su turno de trabajo realizan un lavado de manos con agua y jabón y desinfectan su puesto de trabajo. Mantienen las distancias de seguridad en su puesto de trabajo, cuentan con alcohol y gel desinfectante y la estancia se procura tener ventilada. Ellas se manifiestan animadas de moral, ciertamente agotadas de hablar del bicho.

Si el hilo telefónico dibujara líneas y perfiles, el prototipo de la llamada más habitual que demanda este servicio sería el siguiente: Una persona que presenta síntomas leves de tos y fiebre y que convive con familia. Lo que buscan es saber cómo actuar. "Si la sintomatología es leve y compatible con el Covid, existen unos autocuidados necesarios durante 14 días para no convertirnos en un foco de contagio. Una solución ideal sería autoaislarse en una habitación individual, que pueda tener baño propio y ventana. Que esa persona no reciba visitas y guarde los dos metros de distancia de seguridad con el resto de convivientes. Debe mantener una continua y correcta higiene personal, lavarse las manos con agua y jabón abundante, cubrirse la boca al toser o al estornudar con el antebrazo o con un pañuelo desechable, el cual arrojaremos a una papelera propia, lavar la ropa a 60 o 90 grados y proceder a un buen secado, agua y lejía para desinfectar el baño, llevar un control de la temperatura corporal, beber abundantes líquidos y tratar de coger cita telefónica con su médico de Atención Primaria para que se observe su evolución" , detalla López.

Para los familiares cercanos, que habiten el mismo domicilio, también recuerda Ágreda las pautas básicas: "En caso de que sea alguna persona de grupo de riesgo evitar al máximo el contacto. Hay que guardar la distancia de seguridad, usar guantes en caso de que haya contacto con secreciones, proceder a la limpieza con agua y lejía y, sobre todo, vigilar que el resto de convivientes no experimenta síntomas. Se deben separar los artículos de aseo personal, utilizar guantes y mascarillas en caso de tocar algún artículo del paciente infectado y que toque superficies mínimas. Donde se apoye o toque, son lugares que habrá que desinfectar. Y si el paciente transita por zonas comunes tendrá que utilizar mascarilla".

Un servicio creado en 2014 y clave en la crisis actual . El servicio de Consejo Sanitario es un servicio creado en 2014, dirigido a toda la población, que estaba diseñado para pacientes crónicos, ya que el personal se ocupa de su seguimiento en las transiciones asistenciales; se preocupa de su control cuando estén descompensados; vigila a los pacientes que estén telemonitorizados; y realiza llamadas de confort tras una visita a Urgencias o un ingreso hospitalario. Ahora, con la actual crisis sanitaria, este servicio se ha multiplicado, atiende las 24 horas del día y se ha convertido en el lugar de referencia para resolver cualquier duda de cómo actuar ante el coronavirus, atender a pacientes y familias y derivarlos al recurso oportuno. Atienden 9 profesionales durante el día y 2 por la noche.

"Nos hacen consultas de todo tipo, desde los partes de baja de la empresa, a si van a perder ayudas sociales. Nuestro fin es otro"

"La llamada tipo es de paciente con síntomas leves, con familia y que pide cómo actuar ahora"

Enfermera de Consejo Sanitario

"Tratamos de resolver toda aquella demanda de información sanitaria. Vimos que eso era clave"

Jefa Urgencias Extrahospitalarias