La tecnología y la innovación son dos ámbitos de tal extensión que, por su gran utilidad, abarcan la mayor parte de los aspectos de la vida. Uno de estos ámbitos es la sanidad, tal y como se evidenció ayer en la jornada ‘Innovación social y Salud’, enmarcada en la celebración de un Día Mundial de la Salud que se conmemoró ayer.

En ese ciclo, varias asociaciones expusieron su relación con la tecnología, que les ha llevado a mejorar tanto la relación con sus usuarios como el bienestar de éstos.

Aspace

Una app con recetas de comida texturizada

En Navarra, los centros de Atención a la Parálisis Cerebral de España (Aspace) dejaron de lado la llamada ‘dieta Turmix’ en 2014. “Era aburrida, monótona y creaba conflictos en los comedores”, asegura Raquel Chasco, logopeda de la asociación. Por ello, cambiaron a la alimentación texturizada, lo que supuso “una auténtica revolución”.

La satisfacción de los usuarios con disfagia (problemas para tragar) fue inmediata, pero los problemas llegaron por parte de los hogares. En ellos, las personas se rebelaban porque “no querían retroceder a esa dieta, donde los sabores estaban muy camuflados y no había disfrute por la comida”.

Por este motivo, en 2014 Aspace comenzó a trabajar en una aplicación de recetas de comida texturizada, un “proyecto innovador” para “dar solución a las familias”. En funcionamiento desde 2015, esta app permite a las familias conocer una amplia lista de recetas (hasta 40) de una forma completamente personalizada, ya que existen filtros tanto por intolerancias/alergias, como por alimentos, asi como conocer la información nutricional de cada plato.

Adacen

Experimentación centrada en el paciente

La Asociación de Daño Cerebral Adquirido de Navarra (Adacen) lleva en su propio ADN la innovación. Nacida en 1994, Adacen entonces “surgió de una necesidad, y hoy en día la necesidad es innovar”, asegura Silvia Astráin, responsable de proyectos de la entidad.

Además de información y orientación para las familias y tratamientos de personas con daño cerebral adquirido, la entidad “apuesta por la innovación desde el respeto a la dignidad de la persona” y ha creado un ‘Living lab’ (laboratorio de vivir en inglés), donde a través de la participación de afectados, familiares, profesionales o entidades sociales experimentan en este espacio cuyo “centro de sentido es el paciente”.

De este espacio han salido proyectos como “un sistema de evaluación de la marcha y apoyo a la rehabilitación con sensores inerciales” que indica “si la rehabilitación que se está llevando a cabo se está haciendo bien”; el “diseño de un guante de fibra óptica para la rehabilitación”; un “exoesqueleto en rehabilitación funcional neurológica” o una “silla inteligente con un dispositivo de seguridad preventivo para evitar caídas y choques”.

Departamento de Salud

InDemand, innovación desde los sanitarios

Idoia Gaminde, desde el departamento de Salud, explicó el modelo InDemand, un proyecto en el que se plantea que “la innovación está en los profesionales”. Así, se consiguió “un mapa de talento” en el que 250 sanitarios se implicaron para ofrecer soluciones digitales a problemas que ven en el día a día. De ahí salieron los proyectos ConectaSOS, MiCentro, QuiroHelp y UMD 360, que a falta de presentación sin duda serán parte del futuro de la innovación en sanidad.