a lluvia consiguió en la primera jornada sin estado de alarma que las calles de Pamplona se encontrarán ayer desoladas, sin apenas gente visitando la ciudad. La calle Estafeta o la Plaza del Castillo, que con buen tiempo, se encontrarían repletas de gente, manteniendo las distancias, se veían vacías. Pocos fueron los valientes que se animaron a visitar la capital navarra este domingo sin importarles la lluvia.

"El sábado pensamos en la idea de venir a Pamplona a pasar el día y poder salir un poco, aunque el tiempo no acompaña mucho", relataba José Luis Jiménez, procedente de Eibar. Junto a su familia se encontraba en la puerta del Ayuntamiento posando en la típica estampa pamplonesa en la Plaza Consistorial. "No hemos tenido ningún problema a la hora de venir, el tráfico estaba tranquilo y no nos hemos encontrado ningún control por el camino", explicaba. "Sentarse en una terraza con esta lluvia lo vemos complicado, aunque nuestra idea principal era pasar el día entero, probablemente nos vayamos a Eibar después de comer", señaló.

Francisco Fernández, procedente de Córdoba pero afincado en Vitoria junto a su pareja, que es pamplonesa, decidieron aprovechar el final del estado de alarma para poder visitar a la madre de ella."Sabiendo que finalizaba el estado de alarma, hemos venido a visitar a la madre de mi pareja", expresó. "Siempre que podemos aprovechamos para venir a verla, y hemos estado bastantes meses sin poder venir a visitarla", explicaba. "Aunque el tiempo no acompaña, siempre nos gusta dar un paseito y comprar algo, sobre todo productos gastronómicos navarros", destacó. En su caso vinieron en coche y aseguró que no encontraron ningún problema a la hora de acercarse a la ciudad, "ni controles ni nada". "Lo malo de que el día no acompañe es que no hay mucho ambiente por calles como Estafeta o Mercaderes, que siempre encuentras gente tomando algo", lamentó.

El fin de estos meses de cierre perimetral también dejó imágenes románticas ,como la que se pudo ver en la Estación de Autobuses de Pamplona. Eran las 13:45 horas cuando llegaba a las dársenas un autobús procedente de Donosti. Javier Segura descendió del autocar y vio a su pareja, Milena Palacios, ambos se fundieron en un abrazo que llevaban esperando desde hace cuatro meses. "Aún no me creo que esté aquí con ella", expresaba el joven. "Yo soy de Pamplona, más concreto de la Rotxapea, pero por motivos de estudios y trabajo llevo cinco años viviendo en Donosti y estoy empadronado allá, por lo que no podía venir a Pamplona", detalló. "Mi única opción para poder verla era los fines de semana, pero con el cierre perimetral ya no podía hacerlo", señaló. "Solo voy a pasar el día, ya que trabajo mañana".

Ayer por la mañana se acercaron a la Oficina de Turismo de Pamplona tan solo 10 personas."Aunque el tiempo no acompaña para dar un paseo por la ciudad, hemos atendido alrededor de unas diez personas por la mañana", explicaba Maggy Gaillardet, trabajadora de la Oficina de Turismo. "Sí se ha acercado gente, pero también hubo movimiento durante la jornada del sábado, pero si que se va apreciando, aunque sea en menor medida, un turismo de otras comunidades", detalló. Durante estos meses, las oficinas de turismo se centraron más en un turismo local. "Queremos destacar que durante estos meses nuestra labor no ha cesado y hemos trabajado muchísimo el turismo local, ya que cuando hablamos de turismo siempre pensamos en personas que vienen de otros países y muy alejados de nuestra comunidad, y nos perdemos a aquellos turistas cercanos que también quieren conocer Pamplona", explicó Jon Martínez, otro de los trabajadores de la oficina. "Esta situación covid produce bastante incertidumbre, cuando nos llaman para preguntarnos por la disponibilidad de realizar ciertas rutas o para hospedarse en algún albergue, no sabemos muchas veces que contestar y nos produce una gran impotencia", expresó Gaillardet. "Les decimos que llamen dentro de una semana por si cambian las restricciones, como ha pasado de cara a este domingo, muchos no sabían que iban a venir a Pamplona hasta esta mañana, porque vivimos en una constante duda al informar", señaló Martínez.