- Navarra va a ser seguir relajando restricciones de aquí en adelante. La idea es que cada 15 días se flexibilicen medidas en función de una situación epidemiológica en clara mejoría. No obstante, esta apertura va a ser “progresiva y prudente”, tal y como lo defendió ayer el director general de Salud, Carlos Artundo, y la va a posibilitar el avance de la vacunación. En su comparecencia en el Parlamento foral, Artundo avanzó próximas flexibilizaciones en el sector de la hostelería y de la cultura, aunque no las detalló e instó a la prudencia: “Hay una sensación generalizada de cantar victoria antes de tiempo. No hay que precipitarse, ya la cantaremos entre todos”.

Junto a él compareció también la consejera de Salud, Santos Induráin, que avanzó que “por primera vez el tiempo juega a nuestro favor contra el virus”. “Estamos en disposición de anticiparnos y no precipitarnos para que este verano no sea fallido como el anterior”, expresó la consejera. “Venimos de superar 4 olas de covid, un esfuerzo que tenemos que acabar de rematar. No podemos ahogarnos en la orilla, aunque todavía estamos en una travesía por aguas revueltas”, apuntó Induráin. En este sentido, expresó su preocupación por las nuevas cepas de coronavirus que “siempre nos pueden sorprender y alterar nuestras previsiones”. La consejera abogó por “no bajar la guardia” y preparar un “escenario de transición y flexibilización hacia un verano que no resulte fallido como el anterior”.

En la comparecencia en el Parlamento, a petición de EH Bildu, Induráin también puso en valor que Navarra se encuentra en un momento en el que tiene a la pandemia bajo control: “Estamos marcando los tiempos a la pandemia en vez de que la pandemia nos los marque a nosotros. Cada vez tenemos más y mejores herramientas frente a ella”. “La vacuna nos puede poner delante del virus, que siempre nos puede sorprender negativamente por las mutaciones, pero con este aprendizaje de lo vivido estamos en disposición de anticiparnos, que no es lo mismo que precipitarnos”, señaló. Asimismo, recordó que la Comunidad Foral ha consolidado la tendencia a la baja de los contagios y que “se están encadenando las bajadas durante varias semanas, aunque a partir de ahora estaremos atentos a las diferentes situaciones no solo en contagios, sino en la repercusión en los hospitales”.

Durante su intervención, Induráin también quiso recordar las cifras que ha dejado esta pandemia en Navarra: más de 1.000 personas han fallecido, cerca de 5.000 personas han sido hospitalizadas, 470 han estado en la UCI, y más de 71.000 se han contagiado con prueba de confirmación. Además, el departamento de Salud ha renovado a la mayor parte del retén de refuerzo de covid-19, según apuntó, 871 contratos distribuidos entre la atención primaria y hospitalaria “para seguir posibilitando la gestión de la pandemia y el merecido descanso vacacional de las plantillas”.

En el turno de los grupos, el portavoz de EH Bildu, Txomin González, afirmó que “la situación ha mejorado pero de ahí a pensar que estamos cerca de la solución hay un trecho muy grande, transmitir una sensación triunfalista o de que está casi todo hecho es un error tremendo”.

La portavoz de Navarra Suma, Cristina Ibarrola, consideró que el Gobierno “no ha entendido que salud y economía no eran una disyuntiva y Navarra ha encabezado las medidas más restrictivas con un alto impacto económico pero no le han acompañado los resultados en el control de la pandemia”.

Por parte del PSN, Patricia Fanlo destacó que “nos encontramos ante una situación epidemiológica que es favorable después de 14 días de finalización del estado de alarma”. “Se han hecho 1,5 pruebas por cada navarro. Esa ha sido la apuesta: detección, trazabilidad y aislamiento”, señaló.

La portavoz de Geroa Bai, Ana Ansa, subrayó que “la pandemia no se ha acabado” y que, aunque “los datos epidemiológicos han mejorado mucho, estamos leyendo los datos que ocurrieron hace dos semanas”.

El portavoz de Podemos, Mikel Buil, señaló que su grupo “siempre ha mantenido una actitud de respaldo a la gestión y de huir de las polémicas estériles, pero en el fin del estado de alarma nos ha costado mucho más porque ha habido un viraje radical en el mensaje”.

Por último, la portavoz de Izquierda-Ezkerra, Marisa de Simón, aseveró que “la prioridad es evitar la propagación del virus” y consideró que “el estado de alarma debería haberse mantenido tres semanas más, pero no ha sido así”.

“Estamos marcando los tiempos a la pandemia en vez de que nos los marque ella a nosotros”

Consejera de Salud