Enviado Especial

larvik (noruegA). Ambros Martín espera que su equipo esté a un "gran nivel" esta tarde en el Larvik Arena y, sobre todo, que la eliminatoria quede abierta para el partido de vuelta, el del próximo sábado. "Vamos a hacer todo lo posible porque sea así sabiendo que enfrente vamos a tener al mejor equipo del mundo, bajo mi punto de vista. Es que no son un equipo, son una selección entera que ha sido campeona del Mundo y que ahora lo es de Europa. Además, este año han reunido a las que estaban jugando en Dinamarca (Grammerseng, Nyberg, Leganger...) y son toda la selección noruega exceptuando a las hermanas Lunde, una que esta embarazada y otra, la portera del Györi", recordó.

Para el canario, va a ser "una gozada" enfrentarse a esta equipo, además de "una motivación muy grande y, quizá, el reto más importante que hayamos tenido, no sólo por el título que hay en juego, sino también porque enfrente van a estar las mejores", añadió.

Ambros ve ciertas similitudes entre su equipo y el campeón noruego, sobre todo porque el juego colectivo prima sobre las individualidades en ambas escuadras. "A diferencia de equipos como Oltchim o Györi, destacan fundamentalmente como equipo, un equipo conformado por grandes individualidades pero que juegan en colectivo, igual que nosotros. Por eso, va a ser más complicado batirles. Cuando un equipo se basa en jugadoras a nivel individual, si las tapas pierden bastante potencial; pero cuando juegan en grupo es mucho más complicado".

Por supuesto, el preparador del equipo navarro sabe que la clave de la eliminatoria estará en frenar el contraataque nórdico, la base del éxito del Larvik. "La única forma de lograrlo es ser efectivas, lanzar y tener efectividad. El mayor peligro para nosotras mismas estará cuando tengamos el balón en nuestras manos. Si estamos certeras y buscamos buenas posiciones para lanzar reduciremos mucho ese contraataque mortal que tienen, sobre todo con sus dos extremos. Y no es sólo que te metan un gol, sino que moralmente te afecta negativamente recibir goles así y a ellas les afecta de forma positiva".

A pesar de la fortaleza del rival, el de Lanzarote asegura que "en una final no hay favoritos, aunque está claro que ellas son el mejor equipo con diferencia de todos los que compiten, entre otras cosas porque al ser una selección no tienen parones ni dispersión de jugadoras cuando llegan las convocatorias de las selecciones. Y eso les da una ventaja, además de que llevan mucho tiempo jugando juntas". También recuerda que "están acostumbradas a ganar muchas cosas, incluso de más nivel que la Champions, pero nosotros hemos demostrado que somos un equipo auténtico y la clave no va a estar ni en las teorías ni en las previas, sino en el momento mismo de saltar a la pista". "Tenemos muchas ganas de que llegue la final y de ganarla porque no sabemos si vamos a tener más opciones en el futuro".