“Carmen no le ha mirado a Iñaki ni siquiera el culo”

¿Le ha visto Carmen alguna cosa buena a Iñaki?

-Según van pasando los capítulos, va descubriendo un hombre noble. Supongo que hasta ahora nunca se había imaginado que iba a tratar con hombres tan chochones como Iñaki.

¿Qué significa ser chochón?

-Ja, ja, ja? Que es demasiado bueno, ¿no lo llamáis así por allí arriba?

Pues no, aplicado a un hombre que se considera buena persona, no. ¿Le gustan más los canallas?

-A María sí, a Carmen aún no sé muy bien. Ella ha estado siempre rodeada de canallas y ahora ve por primera vez un hombre con otra textura, de otro lugar y se interesa por una especie diferente.

¿Ha aprendido alguna palabra en euskera?

-Es que es muy difícil, yo oigo al equipo de los vascos y me gusta cuando lo hablan. Pero, mujer, ¡qué difícil es! De momento, “agur” y “egun on”, hasta ahí llegamos.

¿Qué es lo que más le gusta de Carmen, su personaje?

-Lo flamenca que es, su manera de querer?

Lo demuestra muy a su manera, a gritos.

-Es que quiere riñendo, quiere con genio, ella es muy sevillana, muy andaluza en general; creo que las mujeres andaluzas aprenden a amar desde la riña. Quieren dando hostias. Tiene mucho que ver con la vida nuestra de Andalucía.

Dicen que los vascos tienen poco sentido del humor.

-Un tópico, es todo lo contrario. Son los primeros que acaban riéndose de ellos mismos, se cachondean mucho de sus raíces, de sus maneras y de sus formas.

¿Más que los andaluces?

-No sé si más o menos, pero no lo demuestran igual que nosotros. Sus textos en la serie son más cachondos que los nuestros.

No me diga que les han escrito mejores guiones.

-No, eso no. Terminamos reescribiendo los guiones los actores. Cada uno intentamos llevar los textos a nuestro terreno.

¿Cocina vasca o andaluza?

-Me voy a quedar con la andaluza, no es por nada; pero como el gazpacho de mi madre no he probado nada igual. Tengo que reconocer que para mí el País Vasco es un paraíso en todos los sentidos. La comida vasca se hace con muchísimo amor, como se hacen aquí los jamones.

¿Es usted buena cocinera?

-Carmen, no; María, sí. Carmen no ha visto una olla en su vida.

Iñaki cocina bien. ¿Llegará al corazón de Carmen por el estómago?

-No lo sé. Me gustaría decirle que sí por otras muchas cosas. Pero lo de que te cocinen es una buena manera de empezar.

¿Cómo cree que se va a declarar Iñaki?

-Creo que nunca se va a llegar a declarar, fíjate tú.

No me diga que se vuelve virgen a Euskadi.

-Ja, ja, ja? No creo, no me sé los guiones, pero va a tener que ser la andaluza la que pegue el último volantazo, como tengamos que esperar al vasco, no llegamos ni a la vuelta de la esquina...

¡Vaya por Dios!

-Ya te he dicho que es chochón.

¿Ve de la misma forma a Jon Plazaola?

-No, es un tipo bastante noble, un tío muy generoso, pero no es tan chochón como su personaje. Jon es más moderno. Como su personaje, está aprendiendo a convivir en una ciudad que no es la suya, pero creo que se ha adaptado más Jon que Iñaki.

¿Le parece Iñaki un hombre guapo?

-Si no lo fuera, sería complicado que Carmen le mirara.

¿Qué es lo que más le gusta de su físico?

-A mí, a María León, te diría que de su físico nada y de su persona todo. A Carmen no lo sé. Que yo sepa, todavía no le ha mirado ni siquiera el culo. Creo que se enamora de Iñaki por otras cosas que nada tienen que ver con el físico. No ha sido un flechazo, no se ha quedado encandilada; podía haber sido, pero no está escrito así.

¿Es usted una mujer tímida?

-En absoluto, soy lo contrario a mi hermano Paco, él sí que es bastante tímido. En mi casa las mujeres no somos nada tímidas, los hombres mucho más.

¿Qué tal se va a llevar con su suegra?

-Mira, se ha despertado en el capítulo ocho, y se despierta dando guerra. ¡Qué mujer! De armas tomar. ¿Cómo me voy a llevar con una suegra? Pues fatal.