Marijaia desata la fiesta en Bilbao
el inicio de la aste nagusia se celebra, por primera vez en décadas, sin ningún tipo de polémica previa
marijaia, la gran muñeca mofletuda que simboliza las fiestas de Bilbao, salió ayer por la tarde al balcón del Teatro Arriaga para dar paso a una nueva edición de la Aste Nagusia, que este año, por primera vez en décadas, se celebró sin ningún tipo de polémica previa. Esta circunstancia fue destacada por el alcalde de Bilbao, Ibon Areso (PNV), que se felicitó de que las fiestas se vayan a celebrar “sin ningún tipo de polémica” por primera vez en muchos años y que calificó de “extraordinario” el ambiente que se respira en la ciudad. Miles de personas se congregaron en la plaza de Arriaga para asistir al pregón y al lanzamiento del txupin que, poco antes de que Marijaia saliera al balcón, anunció el comienzo de la Semana Grande de Bilbao, que se prolongará hasta el domingo 24 de agosto con más de 300 actos previstos.
Vestido con el característico traje amarillo y el bicornio de pregonero, Asier García, capitán del equipo de baloncesto en silla de ruedas Bilbao BRS, pidió en su pregón que las fiestas se desarrollen “sin diferencias y sin agresiones de ningún tipo”. Además, recordó que durante muchos años las personas con discapacidad no podían disfrutar de las fiestas por las barreras urbanísticas, arquitectónicas y de comunicación, pero ayer resaltó que se han conseguido que muchos de esos obstáculos hayan desaparecido”. Junto a la concejal de Fiestas de Bilbao, Itziar Urtasun, el pregonero reclamó “respeto y alegría” en las fiestas, se acordó de quienes “no pueden estar estos días” y alentó a bilbaínos y visitantes a “pasarlo bien”.
Después, la txupinerade este año, Loreto Errazti, integrante de la comparsa Piztiak, prendió el cohete que anunció el inicio de los nueve días de fiesta. Inmediatamente después, en el balcón del Arriaga hizo su aparición Marijaia a los acordes de la canción que en su día compuso para ella el músico Kepa Junkera, lo que terminó por desatar el jolgorio.
En una tarde soleada y calurosa, muchos de los asistentes al inicio de las fiestas hicieron caso omiso de los llamamientos del ayuntamiento y de las comparsas para celebrar un inicio de las fiestas “limpio” y se volvió a producir, un año más, un abundante lanzamiento de harina y huevos en la plaza. En la concentración festiva ante el Arriaga se vieron algunas pancartas a favor del acercamiento de los presos de ETA, aunque en menor medida que otros años. Previamente al arranque festivo, tuvo lugar en el Teatro Arriaga la tradicional recepción a las autoridades a la que acudieron los miembros de la corporación municipal, así como consejeros del Gobierno Vasco y representantes de partidos políticos.
ambiente extraordiario El alcalde se encontraba exultante por el “extraordinario ambiente” en Bilbao. “Si el tiempo no falla, va a ser una Aste Nagusia de campeonato, como el mundial que viene después”, dijo Areso en alusión al Campeonato del Mundo de Baloncesto, que acogerá varios partidos en Bilbao cuando acaben las fiestas, entre el 30 de agosto y el 4 de septiembre. Además del alcalde y miembros de su equipo de gobierno, en la recepción estuvieron presentes los portavoces de los otros grupos municipales de Bilbao, Cristina Ruiz (PP), Alfonso Gil (PSE-EE) y Aitziber Ibaibarriaga (EH Bildu), que llevaba una pegatina en la camiseta a favor del acercamiento de los presos de ETA.
La presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejeria; los consejeros del Gobierno Vasco Josu Erkoreka y Juan María Aburto; la presidenta del PNV de Bizkaia, Itxaso Atutxa; y la dirigente socialista Idoa Mendia también asistieron a la recepción. El veterano dantzari Ramon Bañuelo bailó para las autoridades su último aurresku de honor tras el cual fue homenajeado. Tras el comienzo de la Aste Nagusia, Marijaia recorrió el recinto festivo para “ordenar” la apertura de las txosnas (casetas de venta de comida y bebida) y comenzaron los actos en los que el Ayuntamiento ha invertido 2,5 millones de euros, la misma cantidad que desde el año 2010. - Efe