El Auditorio Barañáin vuelve a acoger, un año más, el programa Crecer con Arte, que continúa en su larga trayectoria de compromiso con una de sus líneas de acción más importantes: el arte como herramienta de educación integradora y posibilitadora de experiencias de crecimiento personal. En esta ocasión, llevará al escenario El viaje del héroe, un proyecto de inserción y desarrollo a través del cual diferentes jóvenes han realizado un videoclip y un cortometraje en el que el concepto de fondo es el viaje de la vida, con sus sombras y sus luces, donde los y las participantes han podido aprender que, en cierta manera, “todos somos héroes”. La proyección de estas dos piezas audiovisuales tendrá lugar el próximo martes a las 12.00 horas.

Esta es la quinta edición del programa Crecer con Arte y en ella han participado alrededor de 80 jóvenes de los centros CI San Juan Donibane, IES Huarte BHI, Fundación Haritz Berri-Ilundain Fundazioa, Asociación Lantxotegi Elkartea y Colegio Carlos III, así como exalumnos de la anterior edición que ya habían salido al mercado laboral. Todos ellos han participado en las 12 sesiones que se llevan realizando desde el mes de febrero en lo que ha supuesto un proceso de cocreación artística como herramienta de socialización, inclusión y superación.

La coordinadora del proyecto, Natalia Ayesa, destacó ayer durante su presentación que este programa permite “ofrecer a los chicos y chicas un entorno en el que desarrollar diversas cualidades que les ayudarán en su día a día”, ya que la finalidad del mismo es “el crecimiento personal de todos los jóvenes participantes”. Según subrayó, en esta ocasión se ha tratado “el tema de la vida como un viaje, como un proceso de aprendizaje en el que nos damos cuenta de las sombras, los obstáculos con los que nos encontramos día a día, y también de las luces, que serían nuestras habilidades y proezas que tantas veces nos cuesta descubrir que tenemos”.

Por ello, recalca la idea de que “el objetivo de este programa es poner empeño en reforzar las cualidades positivas de estos chavales”, ya que “es nuestra responsabilidad social ayudarles a que conozcan de qué son capaces”. Y todo ello, a través de diferentes disciplinas artísticas como la música, la dramaturgia o incluso la pintura, una de las novedades de este año, ya que “es un arte muy íntimo que nos ayuda a conectar muy bien con nosotros mismos”.

Todo ello ha culminado con la producción audiovisual de un videoclip y un cortometraje que ponen en valor que en la creatividad artística no importan las diferencias entre unas personas y otras. El mestizaje de culturas y realidades produce una fusión perfecta para innovar y crear nuevas iniciativas artísticas que pueden ser el mejor motor de transformación social a través del empoderamiento, la resiliencia y el esfuerzo de los sentimientos de pertenencia, empatía y autoestima.

Ayesa destacó también que todo ha sido creado por los jóvenes participantes, desde la música hasta la letra de las canciones o el mural que se situará sobre el escenario del Auditorio Barañáin. “Al principio siempre dudan de que este proyecto les pueda servir de ayuda pero conforme se van implicando más ven todo lo positivo que tiene y acaban muy contentos con los resultados obtenidos, que son muchos más que lo que se verá en los vídeos”, añade.

cinco ediciones El proyecto lleva ya cinco ediciones con un gran resultado y tiene un convenio con el departamento de Educación único en el Estado, que hace que la participación del alumnado en él cuente en el currículo escolar como un módulo más. Es de destacar también que el proyecto, que cuenta con la colaboración de diversas fundaciones y entidades, tiene una acogida indiscutible en todos los aspectos y que cada vez recibe más solicitudes de diferentes centros educativos.