pamplona - Con motivo de las altas temperaturas que se viven en Pamplona durante las últimas semanas, el Museo de Navarra ha decidido limitar el acceso a sus salas en planta mientras persistan estas condiciones climáticas. De este modo, se han suspendido las visitas guiadas de verano hasta nuevo aviso.

Dentro de este planteamiento, sí se podrán visitar las salas de la Prehistoria, donde destacan piezas como la Estela de Turbil o los bienes procedentes de la cueva de Abauntz (Arraitz-Orkin, Ultzama), cuya secuencia cronológica se extiende desde el Paleolítico Medio a la época romana bajo imperial (45.000 a.C.-400 d.C.), convirtiéndose en la secuencia más completa documentada hasta la fecha en Navarra. Además, se podrá ver la Capilla Renacentista -con retablos de diferentes épocas y una magnífica sillería de coro del siglo XVI-, que en estos momentos alberga la muestra Extemporáneo, del artista navarro Carlos Irijalba y la exposición temporal Henri Lenaerts. Su búsqueda, su silencio, que se ubica en las salas de planta baja.

Por otro lado, la terraza del Museo ofrece unos imponentes mosaicos romanos, vistas únicas sobre el Palacio románico de los Reyes de Navarra y un espacio donde disfrutar de un refresco. La entrada es gratuita. Esta medida quiere propiciar que la visita al Museo sea grata en todo momento. Y es que, según explican desde el espacio artístico, “algunas de las salas han alcanzado temperaturas bastante altas y se ha decidido cerrarlas al público, ya que pensamos que la visita no cumple las condiciones mínimas de confort”. - A. Oliveira Lizarribar