Se hacen llamar las reinas del cabaret más provocador, hilariante y comprometido de Catalunya. El Teatro Gayarre se convierte en el escenario donde actuará mañana The Chanclettes a las 19:30 horas. El precio de las entradas ronda entre 9 y 18 euros y se pueden comprar a través de la página web del teatro. Con una duración aproximada de 100 minutos, la actuación estará dirigida por Josep María Portavella y de la actuación se encargará Xavier Palomino. Ambos también serán parte protagonista de la obra, a la que se suman los intérpretes invitados, Pino Steiner y Sharonne.

La obra AntiCoronaCAVA.net es una propuesta multidisciplicar que apuesta por descoronarlo todo mediante el humor, la música y los tacones de vértigo. El espectáculo gira en torno a la concepción que el grupo entiende por la figura de la corona. De manera más o menos digna, la compañía la vincula a numerosos rostros conocidos de distinta índole. "La posición del trono tiene una dualidad muy fuerte. Por un lado, un estatus de privilegio; por el otro, la responsabilidad implícita que conlleva", afirma Josep María Portavella. El director sostiene que "cuando se habla de la corona, no se atiende únicamente a una idea destructiva, pero sí se recorren las diversas coronas". Por ejemplo, la Monarquía española, las reinas de la música disco y de la época del cine o, algo tan simple y a la vez tan complejo, como el propio coronavirus. De ahí, la inclusión de Freddie Mercury en el guión, reconocido como una de las mejores voces de la historia musical.

El impacto del Covid-19 no iba a quedarse fuera. Incluso, se podría decir que la Corona Verde Vírica ha robado el protagonismo al resto de coronas. "Es la principal en realidad, puesto que ha arrasado con todo. Íbamos como zombies por la vida y ha hecho falta una pandemia para darnos cuenta de que el presente es lo que cuenta", destaca el creador catalán. En estas líneas, el show refleja cómo las cosas más corrientes, como un simple abrazo, han estado prohibidas.

Especialistas en beber, enloquecer y reinventarse, así se describen los miembros de la compañía. "Nuestro humor se basa en la autocrítica y no tenemos ningún problema en mostrar nuestras miserias desde un plano cómico", apunta Portavella. La razón radica en que "los valores que defendemos en el escenario son los mismos que también amparamos en la vida real", añade el también actor de la obra. Esto es, el respeto por la diversidad y la diferencia, o lo que es lo mismo, el respeto en líneas generales. La compañía cabalga hacia "un mundo tolerante donde cada vez haya un poco más de amor y un poco menos de odio", reflexiona el artífice.

TRAYECTORIA The Chanclettes nació "en una pequeña sala de cabaret del barrio El Raval de Barcelona", afirma su director. Los orígenes se remontan a 1994, año en el que "un grupo de amigos que formamos parte del colectivo LGTBI de Catalunya comenzamos a montarnos nuestros propios playbacks", asegura Portavella. Los cuatro primeros años de su proyecto teatral se encaminaron a la profesionalización. Al ser técnico de sonido, Josep María agradece que "esa preparación fue la que me ayudó a manipular los audios y crear discursos artísticos propios a partir de frases dichas por los demás".

Conforme el grupo comenzó a especializarse en el humor, "apostamos por incorporar crítica social, política y sexual en los guiones", comenta el director teatral. En definitiva, The Chanclettes refleja un retrato de la sociedad y el resultado asegura un viaje esquizofrénico y transgresor con una factura impecable.

Su conquista fuera de Catalunya se dio conforme a dos direcciones. Por un lado, "el empujón televisivo al participar en programas de Antena 3 y Telemadrid", explica Portavella. Esta oportunidad les permitió abrirse nuevas puertas pero, sin duda, su crecimiento interno durante los diez primeros años se vincula a la comunidad LGTBI. Dentro de esta, empezaron a ganar presencia en las ciudades a base de tunear los gags de humor conforme a los lugares de destino.

Sin embargo, ha habido quienes no entienden esa singularidad tan especial que caracteriza al grupo. "Cuando tú haces un discurso artístico, tienes que creer en lo que estás haciendo. La gente sabe a lo que va y el que acude al teatro ya parte de una inquietud cultural a diferencia del que se queda en el sofá de casa", argumenta el artista. El autor catalán admite que "nos ha costado siempre más romper el filtro del programador y no tanto del público". Aun así, el grupo apostó por la combinación de disciplinas artísticas diferentes plasmadas en un único producto.

Una mezcla entre Heidi, Las Chicas de Oro y Sexo en Nueva York. The Chanclettes fusiona el toque inocente de Heidi con el rol de Sexo en Nueva York a la hora de romper con tabúes, no solo en el plano sexual, sino también de cara a instituciones como la monarquía o la religión. A esto se le suma el "alucine por Las Chicas de Oro, en tanto que la población adulta protagonizaba conductas comúnmente achacadas a la juventud", comparte Portavella.

A la pregunta del premio que más ha enorgullecido a The Chanclettes, la respuesta es clara: "Llenar las salas y poder mantenerse en el sector. El éxito es ese, seguir cada día a pie de camión", afirmó el director del grupo. De cara al año que viene, el objetivo del grupo es pelear por continuar con el proyecto. En caso de que las circunstancias del momento lo exigiesen, no cabría duda de la predisposición de la compañía para reinventarse. Josep María Portavella prosigue con que "la vida son cuatro días y, por lo menos, dos de ellos tiene que ser muy felices. Nosotros ayudamos a sumar felicidad y alegría en mitad de tanta incertidumbre".