- Comienza esta noche la 35ª jornada de Liga y, como la dichosa permanencia matemática sigue siendo un asunto para echar cuentas y darle fuego a la discusión -básicamente, hasta dónde va a seguir bajando la cifra para lograr la salvación en esta temporada-, Osasuna llega con los números tan claros que cuando comience mañana el partido en San Mamés incluso podría estar salvado con los guarismos y la calculadora en la mano y sin necesidad de lograr punto alguno más en las cuatro fechas que quedan para el final de la competición -la segunda Liga de la pandemia termina el próximo 23 de mayo-.

Matemáticamente la permanencia está a tres puntos de los que tiene Osasuna (en los 43), pero tres encuentros que se disputan este fin de semana por delante del de los rojillos el sábado por la noche en Bilbao pueden zanjar el asunto y otorgan con antelación el gran premio, que no es otro que continuar otra campaña entre los grandes.

La quiniela comienza hoy mismo porque el Elche juega esta noche en Donosti frente a la Real Sociedad (21.00) y si pierde como mucho podría llegar a los 39 puntos en la clasificación final de la Liga -Osasuna tiene 40-. El Alavés juega mañana con el Levante en Mendizorroza (14.00) y si pierde llegaría a los 40 puntos como máximo. El Huesca visita mañana al Cádiz (18.30) y una derrota le condenaría a los oscenses también a llegar como tope a los 39 puntos. Es decir, la coincidencia de las derrotas de cualquiera de estos tres equipos le da la permanencia matemática a Osasuna antes de jugar ante el Athletic. También la derrota del Huesca y que no ganen ni Elche ni Alavés. Todo un escenario posible antes de las 21.00 de mañana y siempre de final feliz.