Pamplona - La selecciones de rugby de Inglaterra y Nueva Zelanda se enfrentan hoy (10.00 horas) en Yokohama en la primera semifinal de la Copa del Mundo de Japón, donde parten como favoritos unos All Blacks aspirantes a ganar su tercer torneo consecutivo y el cuarto en total.

Estos dos equipos se disputarán una plaza en la final del campeonato contra el rival que salga vencedor del otro cruce que se jugarán mañana Gales y Sudáfrica, también en el Estadio de Yokohama.

Nueza Zelanda llega como máxima favorita al torneo tras haber ganado los anteriores Mundiales de 2015 y 2011, y después de firmar una trayectoria impecable en el campeonato que acoge Japón. Los oceánicos se deshicieron con facilidad de Irlanda en cuartos (46-14) después de quedar primeros de un grupo donde también se encontraba Sudáfrica, otro de los favoritos, y al que vencieron por 23-13.

En su casillero, no obstante, consta un empate a 0 con Italia en la fase de grupos debido a que ese partido fue cancelado por el paso del tifón Hagibis por el archipiélago nipón.

Inglaterra también cuenta sus partidos por victorias con la excepción de otro encuentro cancelado por el tifón (contra Francia), y en cuartos sorprendió al imponerse con claridad por 40-16 a Australia, considerado uno de los mejores equipos del torneo.

El entrenador de la selección inglesa, Eddie Jones, se mostró confiado en que sus hombres sabrán aprovechar la oportunidad de meterse en la final y de sacar partido al hecho de que Nueva Zelanda “se vea perseguida por la presión”, según dijo.

“Nadie piensa que podamos ganar”, afirmó el técnico de Inglaterra, una selección que cuenta en su palmarés con un único torneo mundial, logrado en 2003.

Por su parte, el entrenador de Nueva Zelanda, Steve Hansen, admitió que su equipo parte “con más presión” para el encuentro de hoy aunque añadió que están habituados a ello puesto que “se espera” que ganen “todos los partidos que juegan ya sean de cuartos, de semifinales o amistosos”. Hansen también apuntó a las “inmensas expectativas” que pesan sobre Inglaterra después de la decepción del mundial organizado por ese país en 2015, y en el que los ingleses no lograron pasar la fase de grupos.

El técnico neozelandés desplegará un XV prácticamente calcado al que batió el pasado sábado a Irlanda, con las novedades de Scott Barret en sustitución de Ardie Savea en el 6, quien a su vez ocupará el puesto de Sam Cane como back-row. En el caso de Inglaterra, su seleccionador también mantendrá el grueso de la alineación que venció a los Wallabies, aunque recuperará al fly-half Ford y enviará al banquillo al zaguero Henry Slade.

Inglaterra y Nueva Zelanda se han enfrentado en 41 ocasiones anteriormente, con 33 victorias para los oceánicos, 7 para los ingleses y un empate. Si se cuentan únicamente partidos de un Mundial, se enfrentaron en tres choques, todos ellos ganados por los All Blacks. - Efe