PAMPLONA - Calificó este debate social de “intenso” por “la irreflexiva reacción de algunos”, sin concretar quién. Reprochaba así a cinco de los siete grupos políticos que componen el Parlamento foral, PSN, Bildu, Aralar, I-E y Geroa Bai, que suman 27 de los 50 escaños, ya que aprobaron una declaración institucional contra la entrega de esta Medalla a Huarte y Urmeneta, al estar enmarcada su trayectoria en el régimen franquista. Barcina se reafirmó en la decisión adoptada por el Ejecutivo foral ya que “hay sobrados motivos de sentirse orgullosos, muy, muy orgullosos -repitió dos veces este adverbio sin estar escrito en el discurso- de Félix y Miguel Javier” por su “visión para distribuir la expansión industrial por todo el territorio de Navarra, por unir al sector privado con el público y por su generosidad”.

La presidenta siguió insistiendo a los familiares de Huarte y Urmeneta que tienen que decir a sus hijos, nietos y a quienes tomen el relevo en sus familias que “una abrumadora mayoría de navarros estará eternamente agradecida de lo que hicieron por Navarra”. De esta forma, Barcina quería acallar las críticas que durante estas tres semanas se han escuchado por realizar este reconocimiento al constructor, industrial y político, Félix Huarte; y al abogado, militar, alcalde, diputado y director de la Caja de Ahorros Municipal, Miguel Javier Urmeneta.

La mayoría del Parlamento foral ya manifestó que esta Medalla “debe estar vinculada a personas que representen los valores democráticos y acordes con el sentir de la actual sociedad navarra”. Ningún representante de Bildu, I-E y Geroa Bai acudió al acto en el claustro isabelino. Sin embargo, sí que se pudieron ver representantes de los otros dos partidos que manifestaron su repulsa a la entrega de esta Medalla, como a Roberto Jiménez y Juan José Lizarbe, del PSN, y a Patxi Zabaleta, de Aralar.

“Creo que el disgusto inicial que pudisteis sentir los familiares de Miguel Javier Urmeneta y de Félix Huarte se ha visto paliado con creces ante la sucesión de testimonios de personas de todas las sensibilidades que han puesto las cosas en su sitio”, reiteró Barcina. Al mismo tiempo, en la calle Dormitalería, la Asociación de Familiares de Fusilados en 1936 protagonizaba una protesta en contra de este acto, con una pancarta en la que se podía leer 3.452 medallas, en referencia a las personas que perdieron la vida durante la Guerra Civil y represión franquista. Unos metros más abajo, en la calle Mercaderes, otro grupo, convocado por las Asociaciones del Autobús de la Memoria, realizaron una protesta semejante.

“a todos los impulsores” Además de los alagos, en su discurso, Barcina repitió por dos veces, algo que estos días insistían los irreflexivos, como los catalogó ayer la presidenta: el reconocimiento a todos los que trabajaron en el desarrollo de la Comunidad en esos años 60 y 70. “Con la entrega de la Medalla de Oro a los familiares de Huarte y Urmeneta, Navarra muestra su reconocimiento a todos los impulsores del Programa de Promoción Industrial de 1964”.

Uno de los nietos de Félix Huarte, Juan Félix, recordó a otros nombres propios: “Joaquín Gortari o Francisco José Saralegui, que están aquí hoy -por ayer-, Manolo Varela o Ángel Rojo. Algunos ya no están y otros sí, y a todos ellos hay que reconocer su trabajo para modernizar Navarra”.

once minutos y 30 segundos El acto central del Día de Navarra transcurrió sin sorpresas, como en otras ocasiones: himno nacional -por segundo año consecutivo-; himno de Navarra; lectura del Decreto Foral por la directora general de Relaciones Institucionales de turno; la entrega de las Medallas de Oro; los discursos de cinco minutos exactos de los familiares de los reconocidos, con los aplausos de los asistentes de entre 20 y 30 segundos; la interpretación de una canción por la coral; la intervención de la presidenta del Ejecutivo foral y el broche final de la coral.

Barcina leyó sus cinco páginas en once minutos sin salirse del guion. Omitió hacer balance de sus cuatro años al frente de un Ejecutivo debilitado por la minoría en la que gobierna, y se limitó a hablar del desempleo y de la necesidad de un consenso “urgente” entre las fuerzas políticas, el que no ha logrado en esta legislatura. Y de pasada, mencionó la importancia de “erradicar la corrupción.

en breve

Cinco minutos exactos. Jesús Huarte Beaumont y María Urmeneta Ochoa pronunciaron dos discursos de cinco minutos exactos cada uno de ellos.

En compañía de su hijo. A sus 90 años, que en enero ya serán 91, Jesús Huarte subió al estrado con la ayuda de su joven hijo Juan para recibir la Medalla de Oro que entregaban a su padre. Una vez que concluyó de leer su discurso, nuevamente Juan le ayudó a descender los escalones.

No se pronunció la palabra franquismo. En el acto no se citó la dictadura de Franco en cuyas instituciones participaron tanto Félix Huarte como Miguel Javier Urmeneta.

3.772 Yolanda Barcina recordó en su discurso que en estos momentos hay 3.772 desempleados menos que hace un año; y se atrevió hablar de brotes verdes al decir que “Navarra será una de las comunidades europeas que más crecerá el próximo año”.