Pamplona - Unos se enteraron por un aviso de su entidad financiera al teléfono móvil. Otros recibieron mientras trabajaban una llamada de su pareja, que había consultado la cuenta y visto el ingreso de ZF-TRW. Y muchos más, alertados por lo sucedido, empezaron a revisar su extracto bancario, para saber si ZF TRW, la multinacional alemana que les daba empleo hasta ayer, había decidido rescindir su contrato y abonarles la indemnización antes incluso de entregarles la cartas de despido.

“Ha sido lamentable”, se quejaba ayer Peru Larrea, delegado de LAB en la fábrica de Landaben. Su sindicato fue el primero en advertir de lo que estaba sucediendo en una mañana que ya se preveía triste. La empresa había anunciado su intención de hacer efectivos esta semana los primeros 77 despidos de un ERE que incluye 123 salidas de la compañía. Lo que nadie preveía era que la empresa, hiciera efectivas las indemnizaciones sin notificar previamente los despidos.

El modo de proceder de la empresa generó estupor, enfado y nerviosismo entre los empleados, que se encontraban trabajando en la cadena cuando se enteraron de que se les había abonado la indemnización. “Alguno incluso ha ido a hablar con Recursos Humanos y le han dicho que si quería ya podía marcharse”, lamentaba Josi Álvarez, presidente del comité de empresa de la compañía.

De hecho, la identidad de los 77 primeros despidos era un secreto hasta ayer, por lo que la sorpresa entre los afectados fue doble. “Se ha pagado a través del Banco de España, por lo que las entidades no han retenido el dinero un día, como suelen hacer, y se ha adelantado el pago”, explicaba Álvarez, quien criticaba las formas adoptadas por la empresa.

El comité, asimismo, tiene previsto abrir hoy mismo la vía judicial contra el ERE presentado por la dirección y cuya anulación seguramente solicite en la demanda. De hecho, el comité tomó la decisión hace ya unas semanas de no firmar el ERE. Sí se registrará, en cambio, el convenio colectivo que regirá las condiciones de los trabajadores que permanezcan en la factoría. ZF TRW fabrica en Landaben direcciones para vehículos, entre ellos el Volkswagen Polo.