La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, calificó ayer el acuerdo alcanzado en el G7 para reformar el sistema fiscal global con un impuesto mínimo de sociedades de al menos el 15% es “un gran paso hacia la equidad y la igualdad de condiciones”. También el presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, aseguró que se trata de un acuerdo que “va en la buena dirección.

“Tenemos que salir de la crisis de la covid-19 con una mayor igualdad”, escribió en su cuenta de Twitter. El pacto ha llegado la misma semana que la Unión Europea llegó a un acuerdo para obligar a las multinacionales que facturan más de 750 millones de euros a informar de cuánto pagan en impuestos en cada uno de los 27 Estados miembros, una medida de transparencia que busca que las empresas contribuyan al fisco de forma justa allí dónde operan.

Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguró que el acuerdo “permitirá una mayor contribución de grandes compañías mundiales”. “Avanzamos hacia un nuevo sistema fiscal para la era digital global”, apuntó Sánchez en su cuenta de Twitter, donde subrayó que el G7 llega a un acuerdo histórico “que permitirá una mayor contribución de grandes compañías mundiales”. “El objetivo: una mejor distribución de la riqueza para alcanzar mayores cotas de justicia social”, subraya Sánchez.

La OCDE consideró que el acuerdo es un “paso histórico” y la única forma de acabar con “tergiversaciones y desigualdades”, según el secretario general del organismo, Mathias Cormann. A su juicio, un nivel mínimos de fiscalidad es clave para “avanzar hacia el consenso mundial necesario para reformar el sistema fiscal internacional”.